A lo largo de la semana pasada, vimos un conjunto de mensajes que buscan “dar certidumbre” frente al gobierno entrante. Claudia Sheinbaum y su equipo se dieron a la tarea de socializar el documento “Prosperidad Compartida”, en el que subrayan los aspectos positivos derivados de la actual administración en el ámbito económico, además de apuntalar los ejes prioritarios de lo que será el llamado “Segundo Piso de la Cuarta Transformación”.
El documento resalta la inversión extranjera directa, misma que alcanzó en 2023, un 24% del PIB y que significaron unos 36 mil mdd. También subraya el crecimiento del PIB para el mismo año en 3.2%. Adicionalmente, se destacan los datos relacionados con la mejora en materia de consumo privado (una expansión mayor al 5% en 2022) y una disminución de 5.1 millones de personas que salieron de la pobreza entre 2018 y 2022.
El citado análisis fue presentado durante un encuentro con el Consejo Coordinador Empresarial, donde se buscó enviar una señal de responsabilidad macroeconómica, a través de políticas públicas tales como: 1) Reducir el déficit fiscal (hoy en 5%) para el año 2025, con el objetivo de que éste se coloque entre el 3.3% y el 3.5% del PIB. 2) Mantener un equilibrio razonable entre deuda y PIB; 3) Continuar con finanzas públicas sanas, sin condonaciones a grandes contribuyentes, ni “gasolinazos”. 4) Propuestas puntuales en materia de seguridad, energía, agua, enseñanza, digitalización gubernamental, telecomunicaciones para la conectividad e infraestructura.
Entre los aspectos que más llamaron la atención esta su “Plan Nacional de Energía”, en el cual, no solo establece una serie de proyectos de refuerzo a líneas de Transmisión y Distribución para las Redes Generales, sino que también propone “impulsar la transición energética” por lo que “las energías renovables y la eficiencia energética serán una característica” del gobierno entrante. Habrá que estar atentos para verificar si este plan realmente cubre los amplios requerimientos que los inversionistas requieren para profundizar la relocalización de cadenas productivas.
Un aspecto importante del análisis del equipo que ocupará Palacio Nacional, es su enfoque en el agua. En el “Plan Nacional Hídrico”, se propone la tecnificación del riego agrícola, las obras estratégicas y nuevas fuentes, la revisión consensuada de concesiones, las políticas de reúso de agua, los cambios en la “Ley de Aguas Nacionales” y el programa de limpieza de ríos en las cuencas más contaminadas. La sequía que se ha vivido en amplias regiones del país a lo largo de los últimos dos años, es solo un aviso del problema estructural que se enfrenta tanto para consumo doméstico como industrial. Habrá que ver si realmente lo publicado, coincide con un potente presupuesto de inversión, acorde con los desafíos latentes.
Cabe subrayar que, el corazón de la propuesta es la “Estrategia Nacional de Relocalización”, en la cual convergen un total de 22 “polos de desarrollo”, mismos que agrupan visiones sectoriales estratégicas. De esta forma: a) los semiconductores, b) el sector energético, c) el sector turístico, d) la infraestructura, e) el sector automotriz y de electro-movilidad, f) la electrónica, g) el logístico, h) la agroindustria, i) las tecnologías de la información, j) los dispositivos médicos e industria farmacéutica, habrán de converger con regiones específicas del país. Entre las regiones del país se enmarca una acción bastante diversificada a nivel territorial, a diferencia del actual sexenio, mismo que prácticamente solo se concentró en el sureste del país.
Para terminar, el plan nacional de infraestructura delinea importantes rubros en el mapa carretero, puertos, aeropuertos, así como un especial énfasis en trenes de carga y pasajeros. El objetivo es que la planeación de la inversión permita apuntalar las vocaciones productivas regionales, gracias a mantener, especialmente un entorno de certidumbre jurídica para la planeación, ejecución y retorno. De esta forma, la inclusión de sectores sociales y regiones del país, logrará una creciente innovación, digitalización y sostenibilidad.
La propuesta tiene rigor técnico y es atractiva. Ahora falta ver si la política permite que se haga realidad. La #SociedadHorizontal deberá poner atención a las actitudes que tenga el expresidente López Obrador una vez que deje el poder. Sería muy preocupante que un plan tan ambicioso, se vea truncado por la presencia de conflictos entre quienes llevarán las riendas del país y quienes necesariamente, tendrán la obligación de dejarlas. Habrá que cerrar filas con la nueva titular del Poder Ejecutivo.