Diana Gante
Para 2038, la Secretaría de Energía (Sener) estima que estén en circulación 6.4 millones de vehículos eléctricos, lo que representaría el 35.1 por ciento del total de automotores que se espera se comercialicen en ese momento.
De acuerdo con el Programa de Desarrollo del Sector Eléctrico (Prodesen), elaborado por la Sener, con la incorporación de más automóviles eléctricos en las calles, también se espera que se detone la instalación de estaciones de recarga a casi 22 mil puntos.
En tanto México migra hacia la electromovilidad, especialistas advierten sobre la necesidad de alistar más estaciones de carga, las cuales sean seguras tanto para los usuarios como para los automóviles.
Francisco Cabeza, presidente de la Asociación Mexicana de Impulso al Vehículo Eléctrico (Amive) dijo que los sectores eléctrico y de electromovilidad apenas están aprendiendo “a conversar entre sí”, pues comienzan a aflorar las dificultades de la movilidad eléctrica por la falta de energía e infraestructura.
Aseguró que quienes están tomando decisiones sobre movilidad eléctrica lo están haciendo arriba de un coche de combustión interna y quieren legislar y proyectar la demanda a partir de lo que pasa con los coches de combustión.
Es decir, crear muchos puntos de carga públicos cuando en las ciudades principalmente se estarán cargando los autos en los hogares o en las oficinas, de manera que no se está comprendiendo lo que el País necesita en temas de movilidad.
“El Prodesen lo que dice es sí hay capacidad y datos de algunas proyecciones de vehículos eléctricos, pero no te dice que la capacidad (de disponibilidad de redes y energía) no está donde se necesita o no sabemos, porque el sector eléctrico todavía no se ha sentado con esas flotillas, con los transportistas a preguntarles dónde les van a demandar esa energía y las proyecciones que tienen hacia 2030”, puntualizó en entrevista.