Los resultados de Red Bull en el Gran Premio de Mónaco, donde Max Verstappen y Sergio Pérez quedaron fuera del podio, obligan a un concienzudo análisis para lo que sigue en la temporada, advirtió el jefe de la escudería Christian Horner.
El directivo de la formación austriaca reconoció que lo acontecido en dicho circuito, en el que Pérez tuvo un choque, no fue del agrado de nadie porque reveló la falta de confianza de ambos pilotos, pero que les dejó un aprendizaje para no volver a cometer las mismas fallas pues tiene “una enorme cantidad de datos”.
“Obviamente esta carrera se gana un sábado y ahí es donde tuvimos un mal día. Necesitamos entender eso, entender cuáles fueron los problemas en el trayecto y los bordes”, dijo Horner al portal de la F1.
“También detectamos la misma (debilidad) que en Singapur el año pasado, así que ya tuvimos otro ejemplo de ello y sabemos que es un área en el coche en la que debemos trabajar. En este circuito (Mónaco) no supimos aprovechar nuestras fortalezas y necesitamos entender cuáles son esas debilidades y cómo abordarlas”, añadió.
Horner insistió en que si bien todo es un proceso deben poner atención a muchas cosas en el carro para tenerlo al punto y así mantener la competitividad.
“Es un proceso continuo una vez que te adentras en la ley de los rendimientos decrecientes y, por supuesto, tu enfoque cambia dependiendo de tus debilidades. El auto funciona con nuestra suspensión del año pasado y no parece tener estos problemas, por lo que debemos entender si es algo que hemos incorporado”, finalizó el también ex piloto.