Nallely Hernández
Para potenciar las oportunidades del nearshoring es necesario que en México se fortalezcan la educación en tecnologías de la información, competencia bilingüe y especialización en industrias clave, pues de lo contrario la relocalización de la cadena productiva no tendrá el impacto esperado, coincidieron especialistas.
Gricha Raether, profesor de EGADE Business School y miembro del Consejo de la Sociedad Americana de México, explicó que la falta de condiciones en el país provocó que la mudanza de la producción de semiconductores de Asia no se instalara en México, pese a sus beneficios, sino que llegara a Estados Unidos.
“El vacío que dejó Taiwán, China, Hong Kong, en tema de semiconductores durante la pandemia por la proveeduría en el mundo, Estados Unidos estaba buscando alguien que le ayudara con esa vulnerabilidad.
“México debió haber sido la opción obvia para esto, sin embargo, por razones tanto políticas como de infraestructura no logramos potenciar ni aprovechar esta oportunidad”, apuntó.
Para Ricardo Buitrago, profesor investigador en Estrategia y Gestión Internacional en EGADE Business School, es necesario que en México se evalúe el impacto del nearshoring, pues al momento los datos de la Inversión Extranjera Directa revelan que se están haciendo reinversiones y no la llegada de nuevas empresas, por lo que es urgente determinar lo que se requiere para no sólo ser maquiladores, sino también recibir a la industria más especializada.
“No es que nos volvamos la segunda maquiladora del mundo, sino que efectivamente nos volvamos una economía de conocimiento. Es necesario un trabajo colaborativo, entre Academia y sector privado, pero además con unas políticas públicas que sean coherentes con una visión de largo plazo”, indicó.
Gricha Raether consideró que es necesario que la formación educativa en el país se enfoque a fortalecer las capacidades que permitan trabajar tanto en México, como en Estados Unidos, así como aumentar la colaboración entre el sector privado y la academia, además de desarrollar habilidades sobre el manejo de herramientas digitales.
“Los enfoques que la academia en México debe tomar en cuenta es inglés, por un lado, obviamente inteligencia artificial, tecnología, y también el tema de colaboración académica”, dijo Raether.
Ambos especialistas urgieron por la colaboración del sector educativo con la industria privada, para adelantar la formación de talento a las necesidades de las empresas de mayor crecimiento.
“El trabajo de clústeres y sector público debe apuntar al desarrollo de ellos, con una academia alineada con las necesidades actuales y futuras que vamos a estar necesitando”, señaló Buitrago.