El Gobierno federal, que termina su sexenio este año, logró estabilizar la producción petrolera, pero de forma endeble, por lo que la siguiente Administración federal se enfrentará a este reto.
“De entrada, el Gobierno siempre fue muy optimista al estimar 2 millones de barriles diarios a inicios del sexenio; sin embargo, estamos muy lejos de alcanzarlos”, comentó Diego Díaz, coordinador de Finanzas Públicas del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
Sin embargo, sí logró la estabilización que venía cayendo de manera sistemática desde finales de 2003 y principios de 2004.
“Pero algo que es preocupante es que la inversión de Pemex se plantea que se reduzca y se ha planteado así en el último Presupuesto de Egresos de la Federación, sobre todo en exploración y producción.
“Esto podría tener implicaciones en el mediano plazo en términos de la producción y de la restitución de reservas, entonces, creo que hay un riesgo latente de que se empiece a ver una caída en la producción petrolera y ni siquiera se cumpla con esta meta de estabilizar la producción”, advirtió el experto.
De acuerdo con México Evalúa, la inversión física promedio para Pemex ha sido 29 por ciento menor a la observada con el Gobierno del ex mandatario Enrique Peña Nieto y 10 por ciento menor a la registrada en el sexenio del ex Presidente Felipe Calderón.
Para este último año del sexenio también se plantea una menor inversión ante su complicada situación financiera.