Azucena Vásquez
México no está aprovechando el potencial que representa el nearshoring, ya que no está captando ni el 10 por ciento de la Inversión Extranjera Directa (IED) posible, aseguró Grupo Financiero Base.
Los inversionistas extranjeros están aplazando inyecciones de capital en el País ligadas a la relocalización ante la preocupación que generan la inseguridad, deficiencias de infraestructura y la falta de disponibilidad del agua, según Base.
“No estamos aprovechando ni el 10 por ciento de esta oportunidad”, afirmó Gabriela Siller, directora de Análisis Económico y Financiero de Banco Base, durante el Base Day 2024.
Refirió que las nuevas inversiones fueron muy bajas en México el año pasado.
En 2022 y 2023, las nuevas inversiones en el País ascendieron a 20 mil millones de dólares, recordó. Para dimensionar, China tuvo un récord de IED de 320 mil millones de dólares en 2021.
Siller mencionó que actualmente las inversiones pueden estar detenidas a la expectativa del resultado de las elecciones de Estados Unidos.
Estimó que si el País mejora condiciones y soluciona problemas como los ligados a la infraestructura, energía eléctrica, así como incertidumbre y política interna, podría captar por IED, al menos, entre 55 mil millones y 60 mil millones de dólares al año.
Sin embargo, advirtió que esto debe ocurrir cuánto antes, porque México tiene hasta el año 2026 para aprovechar el boom del nearshoring y atraer nuevas inversiones.
“Aunque esta ventana parece que es mucho tiempo, hay que recordar que son decisiones que las empresas toman para 30 años. Entonces, una vez que una empresa ya decidió moverse a otro país, a los dos años no va a decir: ‘bueno, a lo mejor en México ya se pusieron bien las cosas, déjame mudarme para allá’.
“Ya no, ni siquiera lo ve como posibilidad. Entonces, aunque esta ventana está abierta, son estos años de aquí a 2026, cuando mucho, cuando realmente se puede aprovechar para poder recibir nuevas inversiones”, consideró Siller.
Julio Escandón, director general de Grupo Financiero Base, sostuvo que aunque no se tiene un porcentaje de cuántos inversionistas han aplazado la decisión de inyectar capital en el País, sí está ocurriendo.
“He visto aplazamiento en toma de decisiones por estos cuestionamientos. Es un costo de oportunidad que estamos dejando pasar: ‘me espero y después tomo una decisión’”, afirmó en la tercera edición del Base Day.
Explicó que los inversionistas desconocen si los problemas relacionados con la seguridad, infraestructura y agua, entre otros, son coyunturales o de fondo.
“Estos temores han provocado los aplazamientos en inversiones”, reiteró.
Escandón aclaró que la estimación es que el efecto de este fenómeno de relocalización continuará, pero su impacto será menor.
“Creo que el fenómeno va a continuar, pero podrían ser unas tasas de crecimiento mucho más altas”, consideró.
Previamente señaló que actualmente no percibe en inversionistas extranjeros una “alta sensibilidad” en torno al resultado de las elecciones en México de este año.
“Al grado de que casi puedo afirmar que el mercado ya anticipó el resultado; se ve en los indicadores, en el tipo de cambio, en la expectativa de inflación.
“No sólo el mercado local, sino el mercado internacional está anticipando el resultado”, declaró.
