El balón sigue rodando a favor de la Casa Cuna Oasis del Niño, Casa Hogar que saltara a la fama a nivel internacional en México 86, cuando la Selección Alemana de Futbol quedó encantada con el trabajo realizado por la Casa Cuna, institución que este 2024 cumplirá 80 años.
Justo con la partida del “Káiser” Franz Beckenbauer revivió el recuerdo de la Copa del Mundo de 1986, cuando Alemania y Querétaro quedaron unidos por un balón, un encuentro que ha durado más de 90 minutos, tiempos extras y penales, han pasado 38 años desde entonces, pero el apoyo de los alemanes sigue vigente.
La Casa Cuna Oasis del Niño cuenta con el impulso constante de la Federación Alemana de Futbol, pero se pueden realizar aportaciones y brindar apoyo para que la institución cumpla con la tarea de dar educación y apoyo a los infantes en su etapa maternal y preescolar, ya que debido a la pandemia el internado dejó de funcionar.
La hermana Cristina Conde y la maestra Marina Díez Altamirano destacaron la labor que realiza la Selección Alemana de futbol, el vínculo que permanece con el tiempo, de cómo se vieron afectadas por la pandemia y explicaron que poco a poco están aumentando el número de niños y niñas que reciben instrucción escolar a nivel maternal y preescolar.
“Hasta donde sé es que la hermana Adela y la hermana Encarnación, quienes estaban en ese entonces, fueron invitadas a ver el futbol en México 86, de ahí surgió la invitación a los futbolistas, nunca pensaron que fueran a venir, pero sí vinieron, conocieron la Casa Cuna, les encantó el lugar y empezaron a apoyar”, comentó la hermana Cristina.
En dicha visita acudió el equipo alemán, el cual era dirigido por el recientemente fallecido Franz Beckenbauer, quien acudió en 1986 a visitar la Casa Cuna ubicada en la calle 16 de Septiembre en el Centro Histórico de Querétaro.
Desde entonces la ayuda económica que brinda la federación alemana continúa, así como la alianza de Misión Kinder.
Además del equipo subcampeón de 1986, con el correr de los años han visitado ex seleccionados alemanes la Casa Cuna, y en 2011 el equipo sub 17 de Alemania, que perdiera con México la final de dicha Copa del Mundo también acudió al Oasis del Niño.
“Cuando vinieron los jovencitos en 2011 jugaron acá, pero antes vinieron dos veces seleccionados cuando se puso la placa, estuvieron un domingo con nosotros, hicimos una kermesse y otros futbolistas de Misión Kinder estuvieron muy contentos. Ya cuando vinieron los jóvenes los invitaron a los partidos que tuvieron en el Corregidora”, recordó la maestra Marina Diéz Altamirano.
“Se iban fascinados y nos preguntaban cómo le hacíamos para trabajar con tantos niños, cuando teníamos 120 antes de la pandemia”, agregó.
La pandemia lo cambió todo en el mundo y su impacto también se resintió en la Casa Cuna.
“Antes de la pandemia había maternal, preescolar y primaria, ahora sólo tenemos maternal y preescolar, la primaria ya no está”, expresó con nostalgia la hermana Cristina.
Los niños saben lo que representa Alemania para la casa hogar, además de las placas conmemorativas, el escudo y los colores de la bandera germánica estan por varios lados del edificio; también se puede apreciar a la entrada una combi, vehículo de genética alemana, con el color rojo amarillo y negro bordeando la carrocería de la camioneta.
“Ellos saben, y cuando van a venir se preparan para que echen una porra, no sé si la decimos bien en alemán, pero se las decimos, pintan banderines y practican algunas palabras en alemán para decirles”, explicó la maestra Marina, quien dirige el área escolar.
Cumplirán 80 años
La Casa Cuna Oasis del Niño ha vivido de todo en estos 80 años; buenas, mejores, regulares y malas, pero no deja de ser un espacio de amor, recuperación y cariño para que los niños que llegan tomen ese primer impulso hacia un mejor porvenir.
Antes de la pandemia eran 120 niños los que acudían a la Casa Cuna, el 50 por ciento estaba en el internado de lunes a viernes, cifras que se redujeron notablemente.
“Después de la pandemia hemos estado batallando, no han llegado muchos niños, todos se fueron y no han regresado todos, al abrir de nuevo sólo regresaron 12 niños, ahorita ya vamos en 50, vamos despacito; estamos trabajando en sala cuna, en maternal y en los tres grados de preescolar, pero ya sólo como guardería, ya que no tenemos funcionando el internado, son pocos niños y también vemos que las mamás se están comprometiendo más con los niños y vienen de entrada por salida”, compartió la hermana Catalina.
Los niños que llegan, ven realmente un oasis, en el que reciben alimento, medicamentos y estudio.
La maestra Marina explicó que el tema de la migración también se escucha en la Casa Cuna, en donde también atienden a pequeños que han llegado con sus padres desde Centroamérica.
“Hay personas que aportan alimento, apoyo económico, ropa, todo es bienvenido, en diciembre los juguetes. Afortunadamente alcanza y sobra, los miércoles ayudamos a las personas que quieren alimento, se les brinda comida y si hay ropa que les sirva, también se les da”, una práctica que ya tiene muchos años.
En la actualidad trabajan siete maestras en la mañana, apoyan seis hermanas del Sagrado Corazón de Jesús y por la tarde hay personal para la guardería.
Esta Institución nació el 12 de diciembre de 1944, y ante el crecimiento de Querétaro, muchas personas que han llegado al estado desconocen la tradición de la Casa Cuna Oasis del Niño, un espacio que recupera, ama e impulsa a los chicos a saltar al mundo, a enfrentarlo con la energía y mentalidad alemana más ese cariño con sabor a México.
Al final ambas entrevistadas destacaron la satisfacción de ver a chicos que hoy son personas de bien, que han estudiado una carrera y ahora apoyan también, algo que es tan grande como celebrar un gol o ganar una Copa del Mundo, retomando el símil futbolístico, de cuando Querétaro y Alemania se unieron por un balón.
Rudi Vöeller, la visita más reciente
El ex jugador alemán Rudi Völler, quien participó en la Copa del mundo de México en 1986, entregó en 2022 un donativo por 10 mil euros a la Casa Cuna Oasis del Niño en Querétaro.
Rudi Völler acudió a las instalaciones de la casa cuna como parte de la gira que realizó el equipo Bayer 04 Leverkusen en México.
“Recuerdo con mucho gusto el año 1986, cuando en aquella ocasión con el jefe de la delegación alemana, Franz Beckenbauer, y nuestro portero Toni Schumacher vine a esta casa, habiendo recibido la invitación para venir aquí, Egidius Braun tomó la iniciativa junto con todo el equipo de hacer lo necesario para empezar a brindar el apoyo que necesitaba esta institución”, dijo Rudi Völler.
En la visita estuvo presente también el jugador alemán Simon Rolfes, quien será sucesor de Völler en la directiva del Bayer 04 Leverkusen. Rudi aseguró que continuarán brindando el apoyo económico a la Casa Cuna.
Rudi Völler quien se coronó con Alemania cuatro años después, en Italia 90, con su apoyo refrendó el cariño de la nación alemana con Querétaro.