Pagar mayores costos o encontrar mayor dificultad para obtener financiamiento son los principales impactos que enfrentan las empresas cuando no satisfacen expectativas externas en cuanto a temas ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG).
De acuerdo con el estudio CEO Outlook 2023, elaborado por KPMG, hasta 25 por ciento de las empresas a nivel global y 22 por ciento de las empresas en México se enfrentan a dichos impactos.
La firma de consultoría señaló que la reducción de la huella de carbono de las compañías es un reto que implica grandes inversiones y un retorno lento, pues los recursos que se le asignen deben incluir una evaluación del modelo de negocio actual, así como planes y estrategias para su redefinición, en caso de ser necesario.
Ante ello, apuntó el estudio, un primer paso para las empresas mexicanas que quieren avanzar en la reducción de su huella de carbono es trazar la ruta hacia 2030 y 2050, asignar presupuestos y responsabilidades, así como evaluar de manera permanente los avances contra las metas definidas.
“Esto permitirá a los negocios captar atención social, fortalecer su marca y reputación, así como participar con aportaciones de capital que solo se asignan a quienes demuestran una preocupación real por mejorar las condiciones en materia ASG”, insiste el reporte de la empresa consultora.
No obstante, advierte que el gran escepticismo de los distintos grupos de interés, principalmente los inversionistas, se ven en la necesidad de comunicar de manera más efectiva sus compromisos y avances.
El CEO Outlook 2022 mostraba hace un año que 38 por ciento de las empresas a nivel mundial y 34 por ciento de las empresas de México ya batallaban por articular una historia ASG convincente, probablemente porque la gestión de reportes de sustentabilidad o transparencia bajo múltiples estándares se realizaba sin una directriz definida.