Mucho se ha citado en este generoso espacio de El Economista que mucho del quehacer político de Morena es como un deja vú, el término que describe la sensación de que ya se han vivido situaciones actuales.
Como dice el clásico, para las nuevas generaciones, los “Diálogos por la transformación” que coordinará el doctor Juan Ramón de la Fuente para la campaña presidencial del Partido Oficial recuerdan al antiguo IEPES del PRI.
Para no usar versiones, digamos, conservadoras, citemos a la Enciclopedia Británica: “El viejo Instituto de Estudios Políticos, Económicos y Sociales elaboraba las plataformas de campañas de los nuevos presidentes y perfilaba los nuevos ministros”. Vaya, esta “revolución” resultó evolución.
Gran brecha entre política y el México real
Las personas del Poder y la política que deliberadamente dividen a la sociedad para ganar elecciones y para gobernar y crean crisis políticas para capitalizarlas, pocas veces notan lo que se alejan del México real.
Cierto, las acciones y dichos de las personas del Poder y la política determinan muchas veces cómo vive una sociedad, pero allá en el llano saben que los políticos van y vienen, aunque ellos le crean a sus personales espejitos.
Ya escampó en Nuevo León, pero un mesero, según la espléndida crónica de Luis Carlos Rodríguez, sintetizó el pensamiento del México real: “se la bañaron, cómo que dos gobernadores, si con uno ya nos fregaron, imagínense con dos”. Ni Weber ni Sartori.
Imparable violencia, el gran pendiente
A pesar del optimismo oficial, en Chiapas las comunidades siguen indefensas a la violencia de las bandas del crimen organizado que las acorralan sin que nadie haga nada.
Mientras en Guanajuato la violencia se hace política cuando asesinan a seis jóvenes estudiantes, tres de ellos familiares de una política panista o en un poblado de Oaxaca asesinaron al hijo de la alcaldesa panista de Santiago Sochiapan, Veracruz.
O la ciega barbarie de en Michoacán, donde parece que ya nada conmueve, ni siquiera que al asesinar a una familia también mataran a dos niños, de dos y tres años. Lo dicho, el legado sexenal en seguridad será uno de sangrientas cenizas.
NOTAS EN REMOLINO
Como en los partidos de futbol americano, Dante Delgado ha decidido jugar con el reloj y aprovechar mientras el respaldo del poderoso aparato propagandístico oficial para tejer la leyenda de que para MC el arroz todavía no se cuece… Encendió dos velas el embajador de Estados Unidos Kenneth Salazar. Se reunió, por separado, claro con Claudia Sheinbaum y Xóchitl Gálvez… En Querétaro, la fórmula del PAN para el Senado se integró con la figura poderosa de Guadalupe Murguía y el joven Agustín Dorantes… ¿Pasó a inadvertido a la izquierda el rol del exgobernador chihuahuense Javier Corral al encubrir a quienes, en palabras norteñas, “pusieron” para ser asesinada a Miroslava Breach?… Para quien esto escribe ha sido irresistible citar a la maravillosa escritora y periodista Cristina Pacheco, quien, según la luminosa semblanza de Héctor de Maulón describió al viejo Distrito Federal, hoy CDMX, como lo vemos quienes somos migrantes: “esta ciudad enorme, salvaje, inmensamente noble” …
