El Gobierno federal emplazó hasta el 15 de enero a las empresas ferroviarias para sumarse a su proyecto de reactivación de trenes de pasajeros en seis rutas, con la advertencia de que serán entregados a las Secretarías de la Defensa Nacional y Marina si no hay ofertas.
Ayer se publicó un decreto que contempla seis rutas operadas desde la década de los 90 por las empresas Ferromex, Ferrosur y Kansas City Southern, sólo para carga, pero el decreto obliga a que en sus vías se de preferencia al servicio de pasajeros.
También se prevé un tren interurbano del Aeropuerto Internacional Felipe Angeles (AIFA) a Pachuca.
“En caso de que los concesionarios no presenten propuesta viables en inversión, tiempo de construcción, modernización de vías para otorgar el servicio de pasajeros o no manifiesten su interés y aceptación en el plazo establecido, el Gobierno podrá otorgar títulos de asignación a la Sedena o a la Semar”, dice el decreto.
Agrega que “fue realmente una desgracia que el Presidente Ernesto Zedillo, continuador de la política salinista, haya privatizado los ferrocarriles en México”, en alusión a la reforma constitucional de 1995 que quitó al Estado el control exclusivo del sector.
El tráfico de pasajeros por tren había bajado de 23.6 millones anuales en 1980 y a 14.7 millones en 1992, ante la competencia de aerolíneas y autobuses.