La sequía es un fenómeno natural que ocurre en todo el mundo y afecta a la disponibilidad de recursos hídricos esenciales para la vida y el desarrollo humano. A medida que el cambio climático se intensifica y la demanda de agua aumenta debido al crecimiento de la población y la expansión de actividades económicas, la gestión adecuada de las sequías se convierte en un desafío global cada vez más crítico.
El fenómeno de la sequía es más severo, más intenso y con mayores impactos donde hay menos agua. La sequía se magnifica en la mayoría del territorio nacional (México), sobre todo en el norte donde se encuentran nuestros sistemas productivos, porque dos tercios del país son áridos o semiáridos.
La sequía debe estudiarse no por separado, pues guarda relación con aspectos climáticos, poblacionales, productivos, políticos, financieros y sociales. Por lo tanto, el estudio de la sequía hay que abordarla desde la complejidad y las interrelaciones.
Por ahora, no se observa que las sequías estén siendo más severas porque: las sequías han existido siempre y son características de muchos climas del mundo. El problema actual, no se debe a los cambios importantes en la pluviometría que genera déficit de precipitaciones, sino principalmente, porque a ello se suman unas temperaturas muy elevadas que hacen que la demanda de agua por parte de la atmósfera sea muy alta y se dé una mayor evaporación.
… un sistema de alta presión posicionado en niveles medios de la atmósfera propiciará ambiente vespertino de cálido a caluroso en la mayor parte de la República Mexicana, por lo que se pronostican temperaturas máximas superiores de 40 a 45 grados Celsius en Sinaloa y Sonora; de 35 a 40 grados en Baja California Sur, Campeche, Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Colima, Durango, Guerrero, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo, San Luis Potosí, Tabasco, Tamaulipas, Veracruz y Yucatán; y de 30 a 35 grados Celsius en Aguascalientes, Baja California, Guanajuato, el norte de Hidalgo, Morelos, el norte y suroeste de Puebla, Querétaro y Zacatecas.(Conagua, 22 septiembre,2023)
Esto nos lleva a reflexionar acerca de nuestro grado de vulnerabilidad, la cual varía según la región, la demanda de agua, los cultivos y las tecnologías aplicadas; también en función de las modificaciones en los regímenes pluviales y de vientos, de la incidencia de fenómenos ciclónicos más intensos y de la mayor variación en las temperaturas; todo esto incide en aumentar la vulnerabilidad de los ecosistemas y comunidades humanas ante la ocurrencia del fenómeno.
Si aceptamos la idea de que las sequías siempre han existido, hay autores que han estudiado y documentado las sequías en el siglo XIX, apuntado lo siguiente: “De esta manera, de los 39 casos, cuatro son de tipo general: 1868, 1877, 1891 y 1892. La de 1877 afectó a la mayor parte del país y se prolongó hasta mayo de 1878 en el Valle de México; la de 1891 se prolongó hasta 1892 en todo el territorio nacional. En cuanto a las sequías regionales, destacan por su intensidad las de 1822-23 y 1834-35 en la península de Yucatán; la de 1854 en Querétaro y, sobre todo, la de 1868, que afectó a una región muy extensa del país: Chiapas, Veracruz, Oaxaca, Guerrero, Aguascalientes, Nuevo León, Coahuila y el Valle de México. Durante el Porfiriato, las sequías regionales más severas se presentaron en 1875, 1884-1885, 1896, 1901 y 1908.” (Contreras Servín, 2005)
Años de sequía en el estado de Querétaro, en el siglo XIX: 1854, 1882, 1885, 1887, 1889, 1894, 1900, 1902, 1904, 1905, 1907, 1908, 1909.
En años posteriores se ha registrado que “En México, las sequías meteorológicas ocurridas entre el 2000 y el 2002 y entre el 2011 y el 2013 se convirtieron en grandes desastres económicos y ambientales (Neri y Magaña, 2016)
Y sólo como ejemplo, en el año 2023 en Querétaro (Septiembre, 2023), la Comisión Nacional del Agua (Conagua) previó un fuerte abatimiento en pozos y presas derivado de la fuerte sequía que se registra actualmente, principalmente en San Juan del Río, pues para el 2024 podría continuar este factor climatológico, (José Medina, coordinador local en Querétaro de CONAGUA, 2023).
“Hasta un 50 por ciento menos generarán las cosechas de temporal en la entidad, acusó el titular de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Querétaro), Rosendo Anaya Aguilar. Aseveró que la falta de recursos hídricos se padece no solo en Querétaro sino en todo el territorio nacional “Prácticamente medio país está en sequía severa. Consideramos que habrá una merma de entre el 40 y 50 por ciento. Incluso al final del ciclo podría superar el 50 por ciento de las pérdidas en los cultivos de temporal.” (Plaza de Armas, 13 de octubre del 2023)
Mientras tanto a nivel nacional se ha registrado que “Dos terceras partes del territorio nacional experimentan sequía, la proporción más alta desde 2014.” Y de acuerdo con el Monitor de Sequía de México, publicado por el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), la superficie del país afectada pasó de 43.3 por ciento el 30 de julio a 67.1 por ciento el 15 de septiembre. Y se señala que “La insuficiencia de lluvia afecta ya a mil 688 municipios, 68 por ciento del total. Y la mancha de sequía extrema se extendió a la mitad de las entidades del país.”
Se ha dado en llamar a la sequía, el enemigo silencioso, pero ferozmente mortal (Más de 2.000 millones de personas han sufrido por las sequías en el mundo en el último siglo, mientras que 11 millones de personas han perdido la vida como consecuencia de ellas. FAO).
Pero cabe aclarar que hay diferencias entre Diferencia entre sequía, aridez y escasez
Pues la Sequía es una anomalía transitoria, más o menos prolongada, y no predecible, caracterizada por un periodo de tiempo con valores de las precipitaciones inferiores a los normales en el área. Y cuya causa inicial es la escasez de precipitaciones (sequía meteorológica) lo que deriva en una insuficiencia de recursos hídricos (sequía hidrológica) necesarios para abastecer la demanda existente.
Mientras que la Aridez es una situación estructural natural de una región y, por tanto, permanente, con muy baja precipitación anual o estacional.
Y en cuanto a la Escasez, se puede decir que se refiere a una situación permanente de disminución de agua con referencia a la demanda de agua en un sistema de suministro de agua o en una región grande (sequía hidrológica), caracterizada por un clima árido y/o un crecimiento rápido de las demandas de aguas consuntivas.
Ante ello hay que formular estrategias de prevención y mitigación de la sequía, para abordar el problema de la sequía y ello, requiere una combinación de estrategias preventivas y de mitigación que reduzcan la vulnerabilidad de las comunidades y los ecosistemas afectados.
Algunas de estas estrategias incluyen:
Monitoreo y pronóstico
Gestión integrada de recursos hídricos
Infraestructura y tecnología
Planificación y políticas públicas
Investigación y desarrollo
Eficiencia hídrica en todos los sectores y usos del agua.