OPORTUNISMO TEMPRANERO EN LA UAQ
Desde los Balcones
Casi al finalizar la reunión mensual del Consejo Universitario, este último 30 de marzo, un escrito de una asamblea de maestros de Ciencias Políticas, traído de la mano al seno de este H. Consejo, por el C. director de esta Facultad, quien volvió a poner a debate la cuestión del reconocimiento como dirigente del SUPAUAQ, por parte de la UAQ, de la doctora Nuri Villaseñor Cuspinera.
¿Qué se dice en torno a este conflicto sindical? En síntesis, se recomienda que los órganos universitarios, entre estos el H Consejo Universitario del que forman parte el Rector mismo, se pretende que se abstengan de pronunciarse en un sentido u otro en respaldo a la legalidad universitaria que, de ninguna manera dicha legalidad esté reñida con la legalidad constitucional y los órganos jurisdiccionales del caso.
En diferentes términos esta postura la adoptó otro Consejero, al parecer el director de la Facultad de Contaduría que, con diferentes términos, colocó a la autonomía universitaria como algo subsumido a la aplicación chicanera de la pseudo legalidad laboral de turno en el Estado, como si dichas determinaciones fueran inatacables y sagradas las que por tanto se impongan y deban imponerse sobre la constitucionalidad de la autonomía de la UAQ.
Se utilizaron términos rudos e inapropiados, a más de faltos de toda objetividad, para pretender subordinar a la UAQ al juego extra institucional con que algunos actores políticos internos, pretenden inclinar la elección del nuevo rector que se elija en la UAQ y que sólo la UAQ tiene que resolver y no quienes corren por los arrancaderos de los otros carriles burocráticos y de poder, cuya manumisión aparece una y otra vez bajo un pretexto cualesquiera.
Sin análisis alguno del carácter y la naturaleza de la relación laboral de la UAQ con sus maestros y con los trabajadores inextenso, se sostiene que la persona moral UAQ y sus órganos titulares del ejercicio y desarrollo de esa misma Autonomía, por demás dentro de su ámbito, pueda y deba concurrir obligadamente en un sentido u otro al cumplimiento y regulación de su vida institucional con sus integrantes, entre y con todos ellos, los trabajadores en sus distintas calidades y categorías
En estas posiciones aflora el oportunismo tempranero de los grupos y personalidades que pretendieran apalancar sus aspiraciones, no en la aceptación y la voluntad de los universitarios que son quienes deciden y decidirán, sólo los universitarios, ahora y en el futuro la conducción de la UAQ.
En la concepción y praxis de la AUTONOMIA no puede haber falsas conciencia y conductas equívocas a conveniencia del momento. Y eso significa en doble o triple juego de unos y otros. Esto se observa en la última sesión del H Consejo Universitario y en el reciente informe del rector en Plaza de Armas de la capital de Querétaro.