JORGE RICARDO
Xóchitl Gálvez, senadora y aspirante a la Presidencia, descartó que sea una mujer que acostumbre echarle la culpa al pasado, por lo que atenderá el tema de violencia que vive el País sin culpar ni a Felipe Calderón ni al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Yo no soy una mujer que le va a echar la culpa al pasado. No le voy a echar la culpa ni a Felipe Calderón ni a Andrés Manuel López Obrador, yo no le voy a echar la culpa a ellos”, respondió Gálvez en rueda de prensa en Zacatecas.
“Cuando estudié Ingeniería, en mi primera clase de Ingeniería un maestro dijo ‘hay dos clases de ingenieros: los que hacen las cosas y los que dan pretextos’. Entonces, yo acostumbro a ser una mujer que hace las cosas”.
Xóchitl Gálvez, quien se encuentra de gira por Zacatecas, uno de los estados más violentos gobernados por Morena, planteó que se puede resolver la inseguridad mejorando el sistema judicial para acabar con la impunidad, escuchando a las víctimas y “ovarios” o fuerza para encarar a los criminales.
Aseguró estar de acuerdo con una reforma al Poder Judicial para volverlo más eficiente y que ella ha presentado una propuesta para que delitos menores se fueran a la justicia cívica, pues en el 80 por ciento no ameritan prisión, como robarse una caja de pan.
“Tenemos muy distraído el Poder Judicial con un montón de delitos que en la justicia cívica tendríamos que empezar a abordar”, detalló.
“Y perdón que lo diga en estas palabras: se requieren ovarios, ovarios para entrarle a una estrategia, inteligencia, corazón, valentía y fuerza”.
Gálvez reconoció como necesarios los programas sociales para combatir la violencia, pero dijo que no son suficientes, mucho menos el reparto de dinero, ya que la delincuencia siempre va a poder pagar más. Ella ponderó también la detención de criminales.
“La estrategia de abrazos y no balazos no fue una estrategia, fue una ocurrencia criminal, porque los balazos son para los ciudadanos y los abrazos son para los delincuentes, eso no puede continuar”, mencionó.
Gálvez pasó la noche en la casa de una ciudadana zacatecana y luego tuvo una reunión privada con empresarios, tras la cual respondió en rueda de prensa sobre la mala fama de políticos del PAN, el PRI y el PRD, quienes promueven su candidatura presidencial.
Cada uno debe de hacer frente a las acusaciones, que el Gobierno tiene la posibilidad de investigar, pero que en tiempos de campañas se meten muchos rumores, sostuvo.
La panista aseguró que ella misma ha sufrido acusaciones, incluso que López Obrador violó la ley para divulgar información financiera de los clientes de sus empresas, por lo que enfrentará una elección de Estado.
“Voy a enfrentar una elección de Estado brutal, y va a ser despiadado”, expresó.