Monseñor Martín Lara Becerril, Vocero de la Diócesis de Querétaro comentó que las plazas del Centro Histórico se transforman en las madrugadas, lo que ha provocado violencia por personas en situación de calle, que una vez que se drogan o alcoholizan asaltan para poder seguir consumiendo, una situación que no se soluciona con más patrullas, sino con soluciones más profundas, ya que dijo son personas que necesitan ayuda.
“Las Plazas Públicas, como el Jardín Guerrero,Jjardín Zenea, Mariano de las Casas, en Santa Rosa de Viterbo son lugares públicos, con mucha gente y de noche, cuando la gente se va a sus casas cambia la fisonomía de estos lugares y llegan a refugiarse varios tipos de personas que viven en situación de calle”, expresó monseñor Martín Lara Becerril.
El Vicario de la Diócesis analizó la situación y destacó que las situaciones violentas vienen precedidas por personas que se alcoholizan o se drogan.
“En las noches y madrugadas acuden personas que han perdido a su familia, que no son agresivas, acuden porque se sienten más seguras y hay otro tipo de personas en situación de calle, pero que han agregado a la droga y al alcohol en su vida, ellos son agresivos, pelean entre ellos, hay violencia entre ellos, hay violaciones, robos entre ellos de sus pocas cosas, lo hacen para seguir tomando”, dijo de inició Lara Becerril.
El padre Lara Becerril, quien conoce bien la zona, ya que tiene como sede el Templo de Santa Rosa de Viterbo, explicó que es en la medianoche cuando se presentan los hechos violentos y delictivos “Ellos, mientras la gente circula en la noche, a las 8 y 9 se acuestan, pero después de las medianoche es cuando una vez que ingieren es cuando roban a transeúntes, las casas, lo que hacen hasta las 5 de la mañana y después se van, acuden al Mercado Escobedo donde se alimentan y ahí hay droga y alcohol y sí se han vuelto personas muy agresivas, es una población difícil, ya que muchos de ellos ya presentan enfermedades mentales”.
Lara Becerril mencionó que en el caso de la chica fallecida tras ser apuñalada, el agresor venía alcoholizado y dijo que el que haya más elementos policiacos sí evita los asaltos en la zona, pero se van a otros lugares, ya que se produce un efecto “cucaracha”, por lo que pide que se ataquen las causas del problema.
“La Policía los levanta y se los llevan, pero vuelven a las calles, a otras zonas. Ahora hay más presencia policial, la cual ayuda, pero el problema subyace, se produce un efecto cucaracha. (…) Lo que hay que resolver es el problema de narcomenudeo, cómo resolver el tema del alcohol, a mi juicio eso no se ha resuelto”, subrayó Lara Becerril, quien negó que la Plaza Mariano de las Casas sea un foco rojo o sea insegura, ya que comentó que el vive a una cuadra del lugar.
“Decir que es un punto rojo de inseguridad, yo creo que no”.
Ante las opiniones de que se deje de apoyar con dinero o comida a los indigentes, dijo que eso no es una solución.