Los ministros de Exteriores de la Unión Europea (UE) lamentaron este jueves que Rusia se haya retirado del acuerdo para facilitar la exportación de cereal ucraniano por el mar Negro y abogaron por seguir con su apoyo militar y el transporte del grano por su territorio como alternativa a la vía marítima.
“Los ministros tendrán que discutir cómo proceder, pero sólo hay una solución: aumentar el apoyo militar a Ucrania”, afirmó el alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ante la prensa a su llegada al Consejo de ministros comunitarios, que hoy vuelve a abordar el apoyo a Kiev.
Borrell consideró “muy grave” la situación después de que Rusia no solo haya abandonado ese acuerdo, sino de que haya bombardeado la infraestructura y los silos del puerto ucraniano de Odesa durante tres noches consecutivas.
“La respuesta sólo puede ser una, aparte de la retórica: proporcionar más recursos militares”, zanjó.
En su opinión, será necesario que la UE amplíe los llamados “carriles de solidaridad”, las rutas alternativas a través de su territorio por las que está ayudando a Ucrania a exportar su cereal, para evitar que se genere “enorme crisis alimentaria en el mundo”.
“No es solo otro ataque a Ucrania, es un ataque a la gente, a las personas más pobres del mundo”, dijo por su parte la ministra alemana, Annalena Baerbock, en referencia a los “cientos de miles de personas, por no decir millones”, que necesitan “urgentemente” cereales de Ucrania.
Requisitos de Rusia
Para mantenerse en el acuerdo del cereal, Rusia tenía exigencias como la conexión de su banco agrícola, Rosseljozbank, al sistema bancario internacional SWIFT o el levantamiento de sanciones a repuestos para la maquinaria agrícola.
La UE quiere escuchar de la ONU qué pide Rusia antes de debatir qué hacer con las sanciones que le ha impuesto, según un alto funcionario comunitario.
“Desde la UE, hemos hecho ofertas sobre cómo podemos acercarnos a las legítimas sugerencias de Rusia, (…) pero para mí está claro que ahora volvemos a tener una situación en la que Moscú vuelve a utilizar el hambre como arma”, apuntó el ministro austriaco, Alexander Schallenberg.
“Los europeos, y desde luego España, van a hacer todo lo posible para que ese acuerdo se retome”, dijo el ministro español, José Manuel Albares, antes del comienzo del primer consejo de Exteriores que se celebra bajo este semestre de presidencia española del Consejo de la Unión.
Fondo para Ucrania
De momento, los ministros de Exteriores de la Unión Europea respaldaron este jueves el plan para dedicar 500 millones de euros del presupuesto comunitario y medidas más flexibles para estimular la producción de armamento en la UE, en especial munición de artillería, misiles y sus componentes.
La ley fue aprobada como punto sin debate en la sesión que celebran hoy en Bruselas.
El objetivo es facilitar el reabastecimiento de los arsenales comunitarios, mermados por el envío masivo de munición a Ucrania para que pueda defenderse de la invasión rusa.
ASAP, como han bautizado a esta ley en apoyo de la producción de munición en Europa, corresponde a la tercera vía del plan europeo para donar a Ucrania un millón de rondas de munición en un año, que se suma a las que se refieren, en paralelo, a la entrega de todas las existencias posibles que tengan en su poder los Estados miembros y a realizar pedidos comunes a la industria para que sean rápidamente repuestas.