San Juan del Río.- En entrevista para el Plaza de Armas de Querétaro, durante su visita por esta entidad el Obispo de Querétaro, Fidencio López Plaza, mencionó que, es impresionante como los jóvenes han sido víctimas de la delincuencia, de las drogas, así como de suicidios, y de ello se ha dado cuenta durante las visitas pastorales a los diferentes municipios del estado.
De igual forma, refirió que los jóvenes son víctimas de una herencia que han recibido, que ellos no esperaban, “tenemos que caminar con ellos. Cuando hay un cambio, cuando hay una crisis cultural se refiere a una crisis de valores”.
AUTOPISTA
En cuanto al tema de la autopista México-Querétaro, que ha preocupado a la ciudadanía, y por ello que a través de redes sociales, se han organizado para realizar cadenas de oración, así como acudir a la pista de rodamiento a esparcir agua bendita, con el fin de evitar un mayor número de accidentes. López Plaza, refirió que, el problema de la 57 no es local; “no es de ustedes, no es de San Juan del Río, es un problema nacional y por aquí circulan los que van al sur, los que van al norte y la carretera siempre está congestionada. Yo creo que esto requiere en repensarse, buscar causas de tanto accidente y luego sentarse para buscar soluciones más profundas. La bendición es una gran ayuda, pero no basta porque hay otras cosas que deberíamos tener en cuenta. Yo lo que he dicho, es que este acontecimiento tiene causas y cuando se encuentran las causas también se pueden ver mejor las soluciones. Habría que sentarse a buscar las causas de todo esto que está ocurriendo”.
POLITÍCA
Al cuestionarle su punto de vista sobre los posibles adelantos en las campañas políticas y el surgimiento de nuevos partidos políticos, Fidencio López Plaza comentó que, la política y los partidos son necesarios en la sociedad y son medios para crecer como un pueblo democrático. Sin embargo, es necesario poner más abajo de los partidos la fraternidad. “Hay que poner la comunión y la fraternidad primero, porque los partidos, aunque son necesarios, nos parten, y la fraternidad y la comunión no debemos perderla, porque de por sí nuestro tejido social está roto, no queremos más lo roto, queremos comunión y fraternidad”.