- Ya rebasó los 160 mil homicidios dolosos sexenio de López Obrador
- Confirmado: Mercedes y Volvo pujan por camiones para Querétaro
- Acalambra Mauricio Kuri González a colaboradores por sus vacaciones
- Santiago Creel regaña a reporteros locales por andar de preguntones
Estrategia.
Desde la campaña presidencial y luego en el gobierno, Andrés Manuel López Obrador perfiló claramente la que sería su estrategia en materia de seguridad: Atacar las causas, no los efectos. Es decir, programas sociales que apoyaran a jóvenes, madres solteras y adultos mayores.
Becas para estudiantes, apoyo a los campesinos y sembrar arbolitos.
Destinó muchos miles de millones de pesos en ello. El objetivo: Que la violencia heredada del gobierno de Enrique Peña Nieto, acabara al inicio de su administración.
Abrazos, no balazos, pregonaba el tabasqueño.
Pero hete aquí, a 14 meses de que llegue a su fin este sexenio, las cosas no resultaron como las prometió Andrés Manuel.
Ayer, precisamente, el número de homicidios dolosos durante su gobierno, llegó a 160 mil 004, según datos oficiales del Secretariado Ejecutivo de Seguridad del gobierno federal.
160 mil 004 asesinatos. Un preocupante fracaso que se respira día con día en cualquier calle de nuestro país. Un país en llamas, ensangrentado y, para colmo, dividido.
Decía el tabasqueño, en campaña, que la colusión de sus antecesores, Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto, con la delincuencia organizada, habían llevado a México a una espiral de violencia y sangre, que debía parar.
Que le diéramos el voto y una vez en Palacio Nacional, regresaría al Ejército a los cuarteles y, con sus programas sociales, la nación volvería a ser como antes, cuando nos espantaba lo que sucedía en naciones hermanas como Colombia.
Bueno, el tiempo ha sido implacable con el de Macuspana. Los 156 mil 066 homicidios violentos en el sexenio de Enrique Peña o los 120 mil 563 en el de Felipe Calderón, palidecen ante los 160 mil registrados en este gobierno.
Son datos duros, fríos.
Y mientras el presidente se dedica a tratar de sacar adelante su sucesión, desestabilizada tras la irrupción de Xóchitl Gálvez Ruiz, el país se descompone aún más.
La llamada escalera náutica del narcotráfico, que comprende desde Chiapas hasta Sonora, pasando por Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Colima, Jalisco, Nayarit, Sinaloa, y Sonora (por no mencionar Baja California), conforman un coctel político-criminal, donde los delincuentes tienen bajo su control, las ciudades más importantes.
Con un agregado, salvo Jalisco, todos son gobernados hoy por Morena. Todos.
La costa del Pacífico mexicano en manos de Morena.
Pero volteemos al Golfo y el Caribe: Exceptuando Yucatán que gobierna el PAN, todo el litoral está en manos del partido en el poder: Quintana Roo, Campeche, Tabasco, Veracruz y Tamaulipas.
Por donde se le vea, la estrategia ha funcionado… al menos para la delincuencia organizada, pues tiene incendiado al país y con paso franco en el Pacífico y el Golfo de México para subir hasta Estados Unidos lo que sea: Fentanilo, cocaína, armas y personas.
Pero el presidente de México finge no darse cuenta y diariamente, desde su conferencia matutina, saca temas de la chistera: Que si Xóchitl, que si Salinas, Fox o Claudio.
Y nada dice de la corrupción en su gobierno, de los sobres amarillos, de la falta de medicamentos, de…
El continúa con su narrativa, apapachando a sus “corcholatas” y dejando que los cárteles impongan su ley.
A 14 meses de que concluya su gobierno.
160 mil 004 homicidios dolosos.
El plan perfecto…
Para los narcos.
-OÍDO EN EL 1810-
Confirmado.
Mercedes Benz y Volvo son las empresas punteras en cuanto a requerimientos y especificaciones de las 400 unidades de transporte público que comprará este año el gobierno de Querétaro.
Y poco a poco irán al deshuesadero los camiones chinos o surcoreanos que actualmente circulan en la zona metrpolitana.
Ya nomás falta que se respeten horarios de ruta. Que los choferes no excedan los límites de velocidad. Que…
Por algo se empieza.
-¡PREEEPAREN!-
Changuitos.
En el equipo de trabajo del gobernador Mauricio Kuri ya pusieron a todos los santos de cabeza para que se vaya unos días de vacaciones.
Las alertas se encendieron ayer, cuando dijo a los reporteros que aún no tomaba una decisión al respecto y que, en todo caso, era un asunto a platicar con su familia.
La declaración circuló rápidamente en los chats de funcionarios, que ya tenían la maleta en la puerta. Seguramente, sí se tomará unos días de descanso y nomás quiso acalambrarlos.
No aguantan nada.
-¡AAAPUNTEN!-
Una más.
Discursos van y vienen. Presupuestos también. Peor la inseguridad en la carretera 57 se mantiene. Ayer, otro accidente en San Juan del Río, cerró la importante arteria en sentido a Querétaro.
Insisto, el tren es una solución y, sobre todo, el control de los límites de velocidad y pruebas toxicológicas aleatorias.
Así de claro.
-¡FUEGO!-
Sobrado.
Vino, como le adelanté ayer, el aspirante panista a la presidencia de la república, Santiago Creel. Dijo que busca obtener aquí 20 mil firmas para su registro.
Y que no se canibalizará con otro aspirante, el ex gobernador Ignacio Loyola Vera: “No divide, Nacho Loyola es un gran amigo mío, estuve con él en su camino para ganar la Gubernatura, y estoy seguro que no habrá ningún problema con mi amigo Nacho, a quien desde aquí le deseó mucha suerte”.
No le gustó al panista que le insistiera la prensa sobre el tema de fiscalización de los gastos en esta etapa y hasta regañados salieron. Anda nervioso, comentó uno de sus colaboradores.
¡Porca miseria!