Convocados por el Consejo Consultivo del Agua que preside Katia Reséndiz Jaime, instancias estatales y federales han conformado un bloque de trabajo para el saneamiento del Río Querétaro. Mediante un proceso de rehabilitación y reactivación de procesos microbiológicos, se eliminarán los malos olores y se descontaminará el agua.
La primera fase de los trabajos abarca desde la Presa del Diablo y hasta Calesa, en una extensión de 3.7 kilómetros.
El grueso del presupuesto provendrá de las arcas estatales, aún cuando es un río bajo la jurisdicción federal. Participará la Conagua, Cea, Semarnat, Consejo Consultivo del Agua y asociaciones civiles.