- Instala Mauricio Kuri Consejo Consultivo del Agua presidido por Katia Reséndiz
- Falleció ayer un personaje queretano entrañable: Flin a los 72 años de edad
- Ignacio Loyola, ex gobernador y diputado aspira a la candidatura del PAN al Senado
- San Juan del Río y Tequisquiapan, donde delincuentes se mimetizan socialmente
En Yucatán.
El veterano periodista José Ureña, cuya columna Teléfono Rojo se publica en el diario 24 Horas de la Ciudad de México, reporteó la información difundida el domingo por el Diario de Yucatán sobre el “desvanecimiento del presidente López Obrador en Mérida”.
La nota firmada por Joaquín Chaan Caamal, informaba que “El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, habría sufrido un infarto o una complicación cardíaca en el edificio conocido como Casa de la Piedra de la Base Aérea Militar número 8 de Mérida donde acostumbra realizar sus reuniones de evaluación del Tren Maya, según se averiguó. Se disponía a comer antojitos yucatecos que formaron parte del menú del desayuno, que preparan cocineros de la BAM No. 8, cuando se sintió mal y se desvaneció ante el asombro de funcionarios del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) y representantes de las empresas que lo acompañaron en ese momento”.
Quienes estuvieron en la BAM No. 8 consideraron que no pudo ser “un golpe de calor” el que ocasionó su desmayo porque no estuvo expuesto al sol ni a las altas temperaturas que alcanzan hasta 42 grados en estos días. Además, por la hora en que sufrió el desmayo el fuerte calor y la temperatura máxima no había alcanzado su cenit, explicaba el reportero.
Luego, vino el vacío informativo que en buena medida impera hasta hoy. Un Tweet desde la cuenta de AMLO, tranquilizó a un sector de la población, pues acusaba que se había contagiado –por tercera ocasión, de Covid-19.
Pero ello no fue suficiente para detener la ola de rumores, desmentidos y el mar de dudas y sospechas en torno a la salud del presidente de México.
Ayer, en la vorágine, la esposa del Ejecutivo federal, Beatriz Gutiérrez Müller, quiso tranquilizar a los paisanos de su marido:
“Nuestro presidente está guardadito, reposando como debe ser, todo lo demás que se haya dicho sobre el Covid que tiene, ya queda en la inventiva de muchos que, pues a lo mejor no tienen mucho que hacer”, señaló.
“Se preguntaban si iba a venir la esposa del presidente que está enfermo, pues sí, aquí estoy porque yo no estoy contagiada”, aclaró.
Horas antes, desde Palacio Nacional, El Secretario de Salud, Jorge Alcocer, daba en la mañanera el informe de la salud del presidente: “El estado de salud del señor Presidente es bueno, la infección por el virus SARS-Cov2 se confirmó unas horas después del inicio de sintomatología, como ustedes saben”, indicó
“De acuerdo al comportamiento de este virus, al cabo de tres años de su actividad durante la cual tomó varios caminos de infección, el cuadro clínico de las afecciones actuales es leve, con síntomas de inflamación de las vías respiratorias altas, es decir, del tracto respiratorio de la nariz, en la garganta y desde luego con fiebre y cansancio”.
Y remataba: “Ustedes conocen que el señor Presidente tiene el antecedente de haber sufrido un infarto al corazón, la evaluación actual en este tema es de normalidad, de hecho, hasta su función, la tensión arterial se ha controlado más hacia la baja, porque no está haciendo acciones con toda la población, que es una acción dinámica, que eleva un tanto la presión arterial”, reportó.
Pero ni eso ha sido suficiente para calmar a la plaza pública que exige documentos que avalen los dichos de personajes con poca credibilidad.
A todo ello, habrá qué sumar lo escrito por José Ureña este martes:
El Diario de Yucatán mantuvo ayer su versión como es su tradición, sin firmar la nota, recuerda el columnista.
“Desestimó el dicho oficial en su principal: AMLO causa revuelo. Se desvanece en Mérida y lo trasladan de urgencia a la Ciudad de México.
¿Cómo fue?
“El desayuno parecía de rutina, narra el directivo periodístico presente, fuente de la nota de referencia, cuando el Presidente se desvaneció.
-Yo vi cómo se desplomó el Presidente, para sorpresa de todos.
-¿Nadie hizo algo para detenerlo?
-No hubo tiempo. Todo fue tan rápido que cayó con todo su peso de lado. Por fortuna estaba sentado y quizá eso evitó un golpe mayor.
-¿Qué hicieron luego?
-Había mucha confusión y luego fue levantado por personal presente, mayoritariamente militar porque estábamos en una base castrense, y trasladado a un salón anexo.
“De lo sucedido en esa primera evaluación y lo hablado por el cuerpo médico no hay datos.
Lo visible a continuación, sigue el reportero de la primicia, “fue que lo sacaron, lo subieron a una ambulancia y se lo llevaron aparentemente a un hospital”.
No en Mérida.
“Luego se confirmó: viajó en avión de la Fuerza Aérea a la capital para su atención definitiva y a ello siguieron mil especulaciones y un mensaje con lenguaje no común en López Obrador”.
Pero en Palacio dicen que está bien y recuperándose. Ojalá así sea y con la fortaleza que ha demostrado en anteriores ocasiones, el presidente salga esta misma semana a acallar rumores.
Por el bien de México.
-ANDADOR LIBERTAD-
Flin.
Todos lo conocíamos. Era parte del Querétaro cotidiano.
Murió ayer uno de nuestros personajes entrañables: Roberto Rivera Domínguez. Tenía 72 años, pero nunca dejó de ser un niño y como tal se le quería.
Descanse en paz.
-OÍDO EN 1810-
De buena fuente.
Que la credencial de la FGR encontrada en el cateo a una casa del Campanario podría ser auténtica. Me dicen que el hijo de Álvaro Sánchez Sánchez, presunto narcotraficante ejecutado en Tequisquiapan el martes de la semana pasada, estaba o está adscrito a la fiscalía con sede en Veracruz.
Y nadie dice nada.
-¡PREEEPAREN!-
Futuro.
Con la presencia del gobernador Mauricio Kuri se instaló ayer el Consejo Consultivo del Agua, órgano de vital importancia para reunir a los expertos y a todas las instancias públicas en la atención de un problema fundamental: la crisis hídrica.
Preside el organismo la ambientalista Katia Reséndiz, ex candidata a gobernadora del Partido Verde y colaboradora de Plaza de Armas, acompañada de destacados miembros del sector privado y la academia.
Enhorabuena.
-¡AAAPUNTEN!-
Nacho.
En un mensaje a través de twitter el primer gobernador panista de Querétaro (1997-2003) y actual diputado federal Ignacio Loyola Vera se autodestapó ayer como aspirante a la candidatura al Senado de la República, sumándose a la lista de varones en donde ya se veían Luis Nava, Roberto Sosa y Agustín Dorantes.
Más los que se acumulen.
Del PAN y otros partidos.
¡Órale!
-¡FUEGO!-
Riesgo.
San Juan del Río experimenta el fenómeno que hoy tiene en las primeras planas nacionales a Tequisquiapan: Delincuentes que se mimetizan con la ciudadanía y policías y autoridades municipales con intereses inconfesables con esas organizaciones. Ya han sido varias llamadas de atención: Ejecutados y narcomantas en las últimas semanas. Ojalá haga su trabajo el alcalde Roberto Cabrera, más ocupado en asuntos domésticos que en gobernar ese complicado municipio.
¡Porca miseria!