“Todos queremos la paz en el estado”; con esa frase, con mensajes de “Somos Querétaro” y llamados a la tolerancia, la afición hizo latir de nuevo al estadio Corregidora, para celebrar al futbol y hacer olvidar lo sucedido el 5 de marzo del 2022.
Desde el mediodía, a las afueras del Coloso del Cimatario comenzaron con los preparativos de seguridad, la instalación de los equipos para obtener el Fan ID, y los vendedores para poder exponer sus productos alusivos a los Gallos Blancos.
Se hicieron presentes los puestos de uniformes, refrescos y comida, como el de la señora Lety quien se dijo feliz por volver a vender sus gorditas al exterior del estadio.
“Por fin podemos regresar a vender las gorditas, fue un año que no pudimos estar por acá, pero ya regresé”, dijo emocionada Lety, mientras atendía una larga fila de clientes, quienes pagaron sin problema los 30 pesos por gordita.
54 integrantes del staff de FAN ID se apresuraban para asesorar y explicar a quienes aún no contaban con el código, indispensable para ingresar al inmueble y los elementos de seguridad custodiaban al exterior e interior del estadio.
A las 17:00 el sabor a futbol que le pone la afición queretana se volvió a manifestar con ilusiones renovadas. Con esperanzas y el miedo controlado encaminaron sus pasos hacia las puertas del Corregidora.
“La verdad sí estamos emocionados con volver, ya hacía falta la gente en el estadio, sí hay algo de miedo por el recuerdo de lo que pasó, pero debemos regresar a apoyar al equipo”, compartió el señor Delgado, quien junto con su familia fueron los primeros aficionados en ingresar al estadio Corregidora en la zona baja.
El inmueble fue cobrando vida. Con canciones, videos y palomas blancas volaron desde el centro del estadio con un mensaje de paz y nuevos comienzos.
Cuando saltaron a la cancha ex jugadores, símbolos del equipo queretano, la energía y el recuerdo de buenos tiempos se dejó sentir con la presencia de Silvano Téllez, Margarito González, Miguel “Negro” Martínez, Marco Jimenéz, Tito Villa, Raúl Rico, Tiago Volpi y Ronaldinho, quien recibió el cariño de la noble afición queretana.
Fueron pocos minutos los de Ronaldinho en el campo, pero suficientes para enviar una mensaje de cariño y de paz para y desde Querétaro; la playera 49 se volvió a lucir en la tribuna por cientos de niños que volvieron al estadio y que fueron representados por el conjunto de Gallos Smaling, equipo integrado por niños con capacidades especiales y orgullo del deporte queretano.
También estuvieron ellas, las integrantes de Gallos Femenil, quienes con gran júbilo rodearon a “Dinho” para tomarse una fotografía y recibir las ovaciones de los asistentes al partido.
A las 19:05 inició el encuentro, y los Gallos Blancos saltaron motivados y encendidos a la cancha para que al minuto 2 Rodrigo López ingresara al área para cruzar su disparo que desbordó un grito de gol contenido por más de un año.
Al minuto 9 el estadio expresó su respaldo a Mauro Gerk, los primeros gritos de apoyo que escucha como técnico de Gallos Blancos desde la tribuna del Corregidora.
Al minuto 15, Nancy Bailón, voz del estadio, además de impulsar el apoyo para Gallos, solicitó que la afición que estaba de pie, tomara sus asientos correspondientes, situación que tuvo que repetir hasta en tres ocasiones, pero quizá el frío que se sentía hizo que la gente reaccionara de forma más lenta, ya que con brinquitos buscaba entrar en calor.
Para la segunda parte, la baja temperatura caló en la tribuna, se enfrió un poco el ánimo, cayeron dos goles de Juárez, pero Gallos igualó por la vía del penal; el equipo se fue con todo impulsado por su gran afición, se acarició la victoria; el resultado fue un empate, pero el triunfo se dio en la tribuna que volvió a estar presente, para apoyar de manera pacífica y con las ilusiones renovadas.
Ronaldinho dribló a la afición en el Centro Histórico
Por la mañana la ilusión que se respiraba afuera del Mesón de Santa Rosa fue burlada por Ronaldinho, haciendo gala de sus mejores dribles, evitó, en una salida por la puerta trasera, el contacto con aficionados, muchos de ellos niños con el 49 en su playera de gallos, que llegaron desde temprano para una foto o un autógrafo de su ídolo, pero el astro escapó en una camioneta negra para llegar al estacionamiento subterráneo de Palacio de Gobierno.
Ya ahí, mediante una lista de por medio, sólo unos pocos afortunados pudieron acercarse a Ronaldinho, Tiago Volpi, Tito Villa, Margarito González, Marco Jiménez, Silvano Tellez y Raúl Rico, ex jugadores de los Gallos Blancos, para recibir un autógrafo.
Más tarde, ya sin vidrios polarizados de por medio, el brasileño fue ovacionado en el estadio Corregidora, que buscó así olvidar una tragedia que se transformó en fiesta, en un evento de reconciliación con el futbol.
Ronaldinho no vio todo el partido y ya no se quedó para el segundo tiempo, se fue poco tiempo después del gobernador Mauricio Kuri del Corregidora, quien partió al finalizar la primera mitad.
Querétaro apuesta a un borrón y cuenta nueva, a demostrar que puede ser ejemplo y que todos juntos “Pueden formar un equipazo”.
La ilusión se renovó con el triunfo, para el cual la afición jugó un papel fundamental y que desde este 19 de marzo se sumará a ese “equipazo” que merece Querétaro.