Ser mujer y autoproclamarse feminista debe ser un proceso de cambio y de fondo. Así lo mencionó Mayra Alejandra Dávila Alvarado, fundadora de ADAX Digitales, quien en el marco del día de la mujer recordó la importancia que tiene el movimiento para darle seguimiento a las voces que se manifiestan en este día.
Al especializarse en atender casos de violencia digital en el estado de Querétaro en 11 de los 18 municipios, Jalpan de Serra, Landa de Matamoros, Arroyo Seco, Pinal de Amoles, Cadereyta, Tequisquiapan, Ezequiel Montes, Huimilpan, Pedro Escobedo, Querétaro y San Juan del Río abanderando el propósito de dar acompañamiento jurídico a las mujeres que así como ella, han sido víctimas de este tipo de violencia.
Compartió que la lucha por la que inició en 2013 este grupo de mujeres feministas se le atribuye a lo que hoy se conoce como “Ley Olimpia” tras la necesidad de que se reconociera penalmente la violencia digital hacia la mujer.
Forman parte de esta asociación 11 delegadas, de las cuales, destacó que la mayoría son sobrevivientes de violencia y que desde su dolor decidieron levantarse y empezar a ayudar a otras pues comparten la idea de llevar el movimiento y estar presentes en los 18 municipios, empezando con Tolimán, Peñamiller y San Joaquín, en donde, de acuerdo con ella, en las zonas serranas es muy notorio el estigma en donde declararse feminista es muy “pesado”.
“Fue levantarse del dolor y de esa situación de violencia. Muchas no elegimos estar aquí pero tampoco pudimos ser indiferentes o indolentes con otras que también están luchando contra la violencia”.
Mayra Dávila, quien es sobreviviente de violencia digital, mencionó que Olimpia, fue la mujer que la acompaño durante su proceso de duelo y negación.
El 8M es un día en el que todas las voces convergen y se manifiestan, pero es apenas el primer paso para el movimiento feminista “Específicamente este 8M la causa es porque el pacto tiene que seguir siendo con nosotras. Las mujeres tenemos que consolidar que podemos ponernos de acuerdo y poner nuestros derechos en la lucha por encima de cualquier interés particular, político e incluso económico”. Hay que leer, hay que aprender, conocer la teoría y no llevar a la destrucción o tergiversar el movimiento comentó.
Por último, invito a la sociedad a reflexionar sobre el feminismo y reconocer que falta mucho camino por recorrer para que se pueda lograr vivir en igualdad, además de tener empatía con el dolor de las mujeres y puedan llegar al acceso a la justicia pues mencionó que el que las mujeres estén bien, le conviene a todos y todas.