Como parte de los trabajos de la primera etapa de la Reingeniería de 5 de Febrero, inició el colado del piso de uno de los cárcamos, ubicado a la altura de Carrillo Puerto, con lo que esta fase de la obra cuenta con un avance del 63 por ciento.
Esta acción, que consiste en el colado de 450 metros cúbicos, equivalentes a 61 ollas de concreto pre-mezclado de siete metros cúbicos cada una, implica un volumen de concreto empleado que equivale a una alberca semiolímpica.
Cabe señalar que este cárcamo apoyará en el momento que se registre una lluvia, pues desahogará el agua pluvial acumulada en la zona de Epigmenio González hacia el norte de 5 de Febrero, llegando su captación casi hasta UNITEQ en ambos sentidos de la vialidad.
Además de captar el agua de lluvia durante una precipitación, podrá retenerla hasta el momento que deje de llover o baje la corriente en el Río Querétaro. Gracias al sistema de bombeo, el agua almacenada podrá ser sacada en un periodo máximo de cinco horas, y será conducida mediante una tubería de 91 centímetros de diámetro, y una longitud de alrededor de un kilómetro.
El cárcamo tiene una profundidad de ocho metros, está construido en dos secciones que se intercomunicarán, y en medio de las cuales cruzará el paso inferior de Paseo 5 de Febrero en su incorporación a Avenida San Diego hacia el norte de la ciudad.
Iniciar el colado del cárcamo requirió de trabajos previos, como un volumen de excavación de 20 mil metros cúbicos, equivalente a la mitad de la Pirámide del Pueblito; además, se colaron 209 pilas de 15 metros de profundidad.
Este cárcamo tendrá alrededor de 800 toneladas de acero; muros y piso de concreto armado con un impermeabilizante integral, con una resistencia de 300kg/cm2; un trasformador tipo pedestal de 1500KVA, y una tapa hecha de 149 tabletas prefabricadas de un metro de ancho por 60 centímetros de espesor y varios tamaños de largo.
