El presidente municipal de Querétaro, Luis Bernardo Nava Guerrero, reconoció que el Festival Internacional Querétaro Experimental, mismo que está por concluir el 27 de agosto, provocó diversas inconformidades entre habitantes de las plazas sedes de los espectáculos.
Y es que algunos colonos de las inmediaciones de Jardín Guerrero, Plaza Fundadores y del Jardín Zenea, han expresado su molestia ante el ruido, personas alcoholizadas o en estado inconveniente; así como la falta de sanitarios. Además, han mencionado que existe una gran cantidad de basura después de cada evento; circunstancias que afectan la imagen urbana del primer cuadro de la ciudad.
Al respecto, el edil admitió las quejas ciudadanas; pero remarcó que este festival también ha sido atractor de turismo y de reactivación económica, para la delegación Centro Histórico.
“En general, el resultado sí es muy positivo. Sin embargo, sí estamos atentos escuchando a las personas que han manifestado o han expresado algun tipo de situacion en particular; y lo que estamos buscando es que todas las personas puedan tener un resultado como lo ha sido en la economía, en el turismo”.
Sin embargo, el alcalde capitalino sostuvo que se buscarán mejorar las condiciones en las que pueda desarrollarse una segunda edición de este festival, que permanecería por varios fines de semana; con el objeto de evitar a los habitantes de la zona.
“Para los habitantes, tendremos que ver como, para la siguiente edición, ajustar la logística para poder ofrecer sin duda un festival que atraiga ese turismo, que detone la economía; pero que además, no genere ninguna situación para quienes habitan en esa zona de nuestro municipio”.
Una de las peticiones que la ciudadania ha hecho en relación al tema, dijo el presidente municipal, ha sido bajar los decibeles de los espectáculos; o terminarlos a una hora más temprana.
Sobre denuncias como la basura, Nava Guerrero afirmó que la Secretaría de Servicios Públicos intensifica los esfuerzos para realizar la limpieza; pero refirió que existen personas que no son conscientes y tiran la basura en la vía pública.
“Las secretarias que llevan el proyecto estuvieron escuchando, atendiendo y realizamos los ajustes necesarios que podíamos de una vez atender; y nos llevamos algunas inquietudes y reflexiones para próximas ediciones”.