México recibió de Estados Unidos 428 bienes arqueológicos que datan del periodo Posclásico Tardío (900-1600 d. C.), asociado a culturas del desierto asentadas en el norte mexicano y el sur estadounidense, informaron autoridades de la Secretaría de Cultura federal.
“La Secretaría de Cultura federal, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), recibió de parte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) 428 bienes arqueológicos procedentes de los Estados Unidos”, precisó la dependencia en un comunicado.
De acuerdo con las autoridades mexicanas, el lote de objetos fue entregado por el Consulado mexicano de Portland, Oregón, y recibido en México por el subdirector de Registro de Monumentos Arqueológicos Muebles del INAH, Jaime Alejandro Bautista.
Salvador Tinajero, consultor Jurídico Adjunto B en la SRE, señaló que los elementos (puntas de proyectil y raspadores elaborados en pedernal, artefactos de concha y hueso, además de dos cuchillos que preservan su enmangue original) “son representativos de comunidades seminómadas de cazadores-recolectores”.
Entre los objetos entregados en la sede diplomática destacan dos elementos de material orgánico: un huarache y un fragmento de un petate, en regular estado de conservación.
Asimismo, fueron devueltos a México diversos fósiles marinos del género Exogyra, los cuales han sido fechados hacia el periodo Cretácico, con una antigüedad estimada en 60 millones de años.
El arqueólogo Alejandro Bautista indicó que cada una de las 428 piezas será resguardada por el INAH e inscrita en el Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicos e Históricos de la institución, con la posibilidad de que lleguen a formar parte de exposiciones en recintos museísticos.
Hizo hincapié en mantener los lazos de colaboración con gobiernos de otros países a fin de promover la cultura de la restitución de bienes patrimoniales a sus naciones de origen.
Asimismo, realizó un llamado a la población en general a evitar ser partícipes del saqueo de sitios patrimoniales y del tráfico ilícito de bienes históricos y arqueológicos, ya que una consecuencia de tales delitos es la pérdida de la información del contexto de las piezas.
La recuperación es parte de la política exterior del presidente Andrés Manuel López Obrador, quien tiene como “prioridad” recobrar el patrimonio histórico y cultural, según señaló hace unos días el canciller mexicano, Marcelo Ebrard.
El funcionario afirmó que en lo que va del sexenio, que inició en diciembre de 2018, el Gobierno mexicano ha recuperado 8.970 piezas lo que según sus cifras representa 55 % de lo que se había recuperado en la administración anterior.