La secretaria de Cultura del Municipio de Querétaro, Teresa García Besné, indicó que, por la temporada de lluvias, las sedes de los escenarios del Festival Querétaro Experimental podrían variar en cada fin de semana.
Esto, dado que el pasado sábado, se cambiaron las sedes de los eventos de Jardín Guerrero al Cineteatro Rosalio Solano; y de Jardín Zenea a Galería Libertad, por las precipitaciones registradas.
“Estamos llegando al periodo de lluvias en Querétaro, y este proceso nos va a hacer realizar algunos movimientos indispensables y que tendremos que dar a conocer a la población. Estamos considerando algunas sedes alternativas”.
Al respecto, García Besné aseguró que, con anticipación, se notificará a la sociedad sobre los cambios que pudieran surgir según los pronósticos del clima; para promover que los asistentes puedan disfrutar plenamente de las actividades.
Sin embargo, reconoció su preocupación porque disminuya el aforo en estos eventos; pues recordó que la intención es que los visitantes del Centro Histórico puedan interesarse al instante por las muestras artísticas y culturales ofertadas.
“Te tropiezas con la cultura. Vas caminando por la calle y, si no estaba entre tus planes, definitivamente volteas al escenario. Por lo mismo, estamos tratando de evitar llevar el Experimental a los espacios cerrados, a menos que sea de fuerza mayor”.
Y es que Teresa García puntualizó que, en este proyecto que ha llegado a la mitad de los 19 sábados que se consideraron en este festival, se tiene un promedio de 4 a 6 mil espectadores por cada fin de semana, lo cual son números que acreditan el éxito de Querétaro Experimental.
“Ha sido uno de los eventos más exitosos. Se debe en gran medida a qué hay un proyecto curatorial muy sustentado. Estaban muy claros los objetivos, la justificación y las posibilidades que podría tener este festival de gran envergadura; y creo que se han ido cumpliendo las expectativas”.
Incluso, señaló que no se descarta la posibilidad de repetir este programa para el próximo año, pues ha demostrado haber reactivado la vida del Centro Histórico en temporadas turísticas bajas.