El judo de Querétaro ve en franco ascenso, con trabajo y con la suma del talento de los entrenadores Nabor Castillo y Belarmino Salgado, así como los forjadores desde el semillero, como Justino López, entre otros; prueba de ello fue el tercer lugar nacional en el torneo Tomoyoshi Yamaguchi, la incorporación de judokas a la selección nacional más las recientes medallas panamericanas de Diego Díaz y el quinto lugar de Gilberto Cardozo.
Con la incorporación de Nabor Castillo al equipo de entrenadores de Querétaro, judoca olímpico en Londres 2012, se está redondeando una selección estatal que ya empieza a dar muy buenos resultados.
“Querétaro cuenta con Gilberto Cardoso quien tiene que aprovechar este ciclo olímpico y llegar a Paris 2024, Diego Díaz quien ya se sumó a ese camino, ambos ya son parte de le Selección Mexicana y Santiago Cardoso quien va para allá, por lo que Querétaro tendría a tres seleccionados, una base muy buena, además del trabajo con nuevos talentos que vienen empujando fuerte”, destacó Nabor Castillo.
Para el Torneo Macroregional del 22 de abril, Querétaro se ha preparado fuerte y llevará a 27 judokas, 14 hombres y 13 mujeres para cumplir con el objetivo de poder clasificar a unos 20 atletas para el torneo nacional de Conade. Al colectivo del judo queretanos se suman Justino López, quien tiene una vida dedicada al judo como detector de talento infantil y juvenil, además de que sigue compitiendo como veterano y otros entrenadores como Mario Páez, quien también es árbitro, José Rancaño, JosuéNogueira, Cedric Plouin, Alfredo Vázquez de la UAQ, todos han creado, junto a la Asociación de Judo del Estado de Querétaro, un grupo que está empezando la cosecha de medallas nacionales e internacionales
“Ya estamos en la mira de todos los estados, ya nos voltearon a ver, se preguntan qué está pasando en Querétaro y ahora que llegamos, tenemos que seguir subiendo y mantenernos en lo más alto del judo de México”, destacó Castillo, quien dice de manera modesta que sólo viene a sumar y ser un entrenador más
Parte del sueño para que Querétaro se consolide como una potencia nacional y sea referente internacional es que se pueda desarrollar un cetro de alto rendimiento en el estado.
“Uno de mis deseos a mediano plazo es poder generar una villa de atracción para judokas de México y Latinoamérica para elevar nivel. Si logramos establecer un centro nacional llegarían a entrenar los mejores judokas del país y atraería a atletas de otros países que no siempre pueden viajar a los campamentos en Europa”, visualizó Nabor Castillo Pérez.