Por cuestionar el actuar del Secretario General del SUPAUAQ, Ricardo Chaparro Sánchez, se ha iniciado una persecución al interior del sindicato en contra de 31 miembros jubilados a quienes además de marginarlos de la organización que ellos fundaron, se les ha suspendido el servicio de seguro médico colectivo, dejándoles vulnerables a las enfermedades crónicas que algunos de sus integrantes padecen. Así lo denunciaron en rueda de prensa quienes externaron que el hostigamiento inició porque cuestionaron el cobro de una cuota extraordinaria por parte de Chaparro Sánchez.
Al profundizar en el tema, la Maestra en retiro Marcela Rodríguez, denunció que la exclusión del sindicato de los 3 jubilados se consumó de forma unilateral, fuera de la ley y violando los estatutos del sindicato. Explicó que durante el rectorado del Doctor Gilberto Herrera Ruiz, el sindicato pasó por momentos complicados al no tener ingresos desde la Rectoría. A partir de entonces, los sindicalizados aportaron de forma voluntaria para que el Sindicato superara la crisis. El abogado que entonces asesoraba a los trabajadores no cobró sus honorarios al no haber las condiciones económicas sino hasta la llegada de Ricardo Chaparro Sánchez a la Secretaría General del Comité “Se entabló una demanda y el Sindicato no respondió. Se hizo el requerimiento e hicieron oídos sordos. La consecuencia fue que el Sindicato perdió la demanda y la cuenta superó el millón de pesos. La decisión del líder sindical fue que sin consultar a la Asamblea General, decide cobrar una cuota extraordinaria del doble, cuando la culpa fue del Comité por no haber respondido en tiempo y forma”.
De esta manera, los denunciantes acusaron que Ricardo Chaparro Sánchez hizo que los sindicalizados pagaran por sus omisiones legales. La Maestra Marcela Rodríguez, apuntó que por las duras circunstancias económicas que presentan los maestros jubilados, protestaron por el cobro de la cuota extraordinaria, mediante los lineamientos jurídicos establecidos y enviando oficios al Secretario General y Rectoría en donde manifestaban su rechazo por el gravamen. Tras ser ignorados por su líder, decidieron iniciar una demanda ante el Juzgado Primero de lo Laboral para luego ser remitidos al Centro de Conciliación del Estado “Se presentó la Universidad y el Sindicato en cuatro ocasiones y llegamos a un acuerdo”.
En el convenio, firmado ante instancias estatales, Ricardo Chaparro Sánchez se comprometía a devolverles la cuota extraordinaria que se les había cargado. Marcela Rodríguez, acotó que nunca se negaron a pagar las cuotas establecidas “Nada más la extraordinaria”.
Tras el acuerdo, inició la persecución de los maestros jubilados a quienes excluyeron del Sindicato, pasando por encima de la Ley Laboral. De acuerdo a lo señalado por Marcela Rodríguez, la mayoría de los 31 trabajadores, supera las siete décadas de existencia “Quiero públicamente hacer responsable al señor Chaparro que si alguno de mis compañeros no quiera Dios fallezca, no tenemos seguro de vida colectivo porque hasta allá llegó la osadía de este señor que ni aún estampando su firma en un convenio laboral respetó”.
Marcela Rodríguez, externó que para cualquier cuota extraordinaria, debe pasar por la asamblea del Sindicato y en su caso, ser aprobada. Lamentó que en este caso, sí se convocó a una asamblea Virtual pero únicamente a sus “adeptos”, dejando fuera a quienes no congeniaron con su forma de operar. Mas aún, acusaron que en dicha asamblea no estaba considerada en el orden del día la imposición de la cuota extraordinaria.
Sobre las acciones a tomar, advirtieron que recurrirán de nueva cuenta a las autoridades laborales ante el incumplimiento de los acuerdos. Refirió que solicitarán que se haga una auditoría en las finanzas del sindicato para que se hagan evidentes los manejos discrecionales de los recursos “Vamos a continuar esa demanda y le daremos seguimientos”. Expuso que el SUPAUAQ está compuesto de alrededor de mil 600 afiliados. La cuota que paga cada trabajador va en base a la categoría del sueldo. Lo que marcan los estatutos del Sindicato, obligan a cada trabajador a dar el .5 % de sus ingresos.
Respecto a su salida del sindicato, los denunciantes expresaron que la única forma legal de que un afiliado sea expulsado de la organización, es mediante la asamblea, por lo que la determinación de Ricardo Chaparro ha sido arbitraria y en contra de los ordenamientos del SUPAUAQ “Quiero mencionarles el Artículo 31 de nuestros estatutos habla de la salida definitiva del SUPAUAQ. Esta se da por tres razones: Interés del propio sindicalizado, por renuncia escrita y/o una expulsión definitiva sancionada por la Comisión de Honor y Justicia y por Asamblea General”.
Por su parte, Hugo Pedroza Falcón, advirtió que el sindicato tiene recursos económicos de sobra y por ello, no deberían de recargarse sobre los más vulnerables para que paguen por una omisión del equipo jurídico del SUPAUAQ “La deuda se deriva de una falta de atención por parte del Secretario General a un asunto jurídico. No tendría porque endosarnos a todo el gremio el monto de ese litigio perdido por sus omisiones”.
Cuestionando el manejo de las finanzas, afirmaron que previo a la pandemia habían 4 millones de pesos en las arcas del SUPAUAQ. Ante la pandemia y las restricciones, afirmaron que no ha habido ninguna clase de festejos con los agremiados, por lo que deberían poder pagar el litigio sin afectar a los trabajadores.
En la rueda de prensa, estuvieron presentes la Maestra Cristina Cabrera Muñoz, Rosa María Vázquez Cabrera, Hugo Pedroza Falcón, Marcela Rodríguez, Margarita Hernández y Francisco Ríos Ágreda.