España exigió respeto y condenó este jueves las declaraciones del Presidente Andrés Manuel López Obrador en las que criticó a las empresas españolas y sugirió hacer una pausa en las relaciones.
“El Gobierno de España rechaza tajantemente las descalificaciones realizadas por el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, en los últimos días contra España y las empresas españolas”, dijo el Ministerio de Asuntos Exteriores español en un comunicado este jueves.
“España trabajará siempre por mantener las mejores relaciones con México y reforzar los lazos con este pueblo hermano. El Gobierno desea unas relaciones basadas en el respeto mutuo, como quieren los españoles y los mexicanos, sin este tipo de manifestaciones”.
La Cancillería española agregó que ambas naciones son socias estratégicas y aseguró que los pueblos estaban unidos por “profundos lazos humanos, culturales, históricos, lingüísticos y económicos”.
“Más de 175 mil españoles viven en México y cerca de 30 mil mexicanos residen en nuestro país”, señaló el comunicado.
“España es el segundo inversor en México y cuenta con 7 mil empresas en ese país. La inversión española se eleva por encima de 70 mil millones de euros y la mexicana en España supera los 25 mil millones”
El diario El País informó este jueves que el Ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, y el Canciller mexicano Marcelo Ebrard hablaron en una llamada luego de los comentarios de López Obrador.
La conversación, agregó el rotativo, tuvo un “buen tono”. No se dieron más detalles.
López Obrador luego matizó que sus comentarios eran informales y dijo que no estaba planteando oficialmente una ruptura, sino que exigía respeto hacia México, al tiempo que acusaba a las compañías extranjeras de aprovecharse del País.
“No es ruptura, sino una protesta respetuosa y fraterna. Vamos a serenar la relación. Que ya no se esté pensando que se va a saquear a México”, dijo el Mandatario.
“Es una falta de respeto. Deberían ofrecer disculpas. No lo han hecho”, declaró el presidente de México.
