Hoteleros de distintos centros turísticos en Quintana Roo pidieron al Gobierno federal que dialogue con los afectados por la expropiación anunciada ayer y que comprende cientos de predios que suman 2.4 millones de metros cuadrados.
Jesús Almaguer, quien en diciembre pasado fue elegido presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, consideró que debió haber existido un diálogo previo con quienes resultarán afectados en sus propiedades.
“Yo creo que todo en la vida se consigue más fácil dialogando y siendo propositivos que imponiendo voluntades y no consultando a los posibles afectados”, dijo. “A todos nos sorprende (el decreto) por no haber un diálogo previo y por no haber una propuesta, y yo creo que es importante, aún con el anuncio, el dialogar con los posibles afectados”.
El lunes, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) dio a conocer en el Diario Oficial de la Federación (DOF) la declaratoria para iniciar el proceso de expropiación de 2.4 millones de metros cuadrados de propiedad privada en los municipios de Benito Juárez, Solidaridad y Puerto Morelos, en el estado de Quintana Roo, que serán destinados para la construcción de obras de infraestructura pública relacionadas con el Tren.
Abelardo Vara, presidente de Grupo Cancún, comentó que la mayor parte de quienes serán afectados por la expropiación no son hoteleros, sino ejidatarios y que lo mejor hubiera sido negociar con ellos de manera previa.
“Primero debió de haberse hecho un estudio muy profesional de qué era los más conveniente en términos económicos, en términos de servicio, en términos de ver el futuro, qué era lo más conveniente para diseñar o establecer la ruta del Tren Maya y una vez que se hubieran tenido esos estudios y aceptado los posibles costos y todo lo demás, pues definitivamente ponerse a trabajar con las personas que están involucradas, los propietarios, los ejidatarios, que son muchísimos”, afirmó. “La gente está muy fregada, los ejidatarios, ahorita que hay un poquito de frío por acá, que no está uno acostumbrado, viven ahí en su chocita y todo lo demás y luego les quieren quitar sus tierritas, pues deben tener la opción de defenderse”.
Almaguer consideró que anuncios como el dado a conocer el lunes en el DOF no son buenas señales para la inversión, pues mandan el mensaje de que el Gobierno es inflexible para ciertos temas.
“Hay que cuidar la imagen ante los inversionistas, porque estamos promoviendo tratados de libre comercio, estamos promoviendo la inversión extranjera, pero, si damos señales equivocadas o señales de ese tipo, obviamente, todo lo que se hace para atraer a los inversionistas o al turismo se viene al suelo”, recomendó. “La impresión que se da es que se actúa de manera tajante y debemos de cuidar ese tipo de señales, todos. Y el diálogo se debe establecer entre los involucrados, llámese dueños de los terrenos, el Gobierno del estado, el gobierno de cada municipio involucrado para llegar a acuerdos y buscar soluciones”.
