Aunque se esté en desacuerdo con las políticas públicas del Gobierno del Presidente Andrés Manuel López Obrador, se tiene que reconocer la habilidad política con que planeó su participación en la Cumbre Trilateral a que convocó la Casa Blanca.
Analizaron bien el clima político norteamericano y saben que, por ahora, Washington y Otawa necesitan de la alianza del T-MEC y, por razones de sus políticas domésticas, no pueden presionar demasiado a México.
Vimos en Washington al Presidente en campaña, seguro de tener de su lado al hábilmente usado nacionalismo de una mayoría de la sociedad mexicana y de que nada impedirá que, por sobre informaciones y opiniones negativas, prevalezca su narrativa personal de la Cumbre.
Por prejuicios México pierde oportunidad
Son varias ciudades de Estados Unidos, del sur, del suroeste, del medio oeste y del norte del país, las que compiten por aprovechar los subsidios federales y atraer fábricas de los chips cuya escasez asfixia a la industria mundial.
Cabildean con los fabricantes de chips mediante al ofrecimiento de grandes rebajas del predial e impuestos locales, así como la construcción de la infraestructura que necesiten las plantas.
A pesar de las ventajas de México, el gobierno lopezobradorista, por las fijaciones sobre la mano de obra de migrantes, prefiere promover el uso de la mano de obra migrante en las plantas en Estados Unidos.
Los años dorados de hace medio siglo
Muchas concentraciones de apoyo, en los años dorados del régimen “autoritario” del siglo pasado, aunque el gobernante en turno fuera muy popular, para que valieran la pena las organizaba, obviamente, el Partido Oficial.
En esos años dorados, durante una gira presidencial por una entidad del centro de la República, el Presidente salió al balcón del Palacio de Gobierno y contempló por varios minutos la multitud que desde la plaza le vitoreaba.
“¿Piensa en su popularidad, señor Presidente?”, preguntó el Gobernador. La respuesta del Presidente, experimentado político, fue: “No, mi amigo, calculaba cuanto le costó reunir y transportar a estos miles de personas”. ¿Habrá cambiado algo?
NOTAS EN REMOLINO
Nadie en el Gobierno Federal se pregunta, por lo visto, si los destinos turísticos se tendrán que resignar a que en sus playas se maten los narcomenudistas que trabajan a la vista de todos… Recordó José Woldenberg que los funcionarios de los organismos autónomos tienen la primaria obligación de ser fieles a la Constitución… Aunque no es cierto lo del “jalón de orejas en Washington, al menos no en las actuales circunstancias, que públicamente personajes de la oposición lo festinen en públicas declaraciones es lo que, siendo generosos con el lenguaje, se califica como estupidez… Desde muchas ciudades de la República llegan las advertencias de que, al Sistema de Administración Tributaria, al SAT, con las actuales limitaciones de recursos humanos para atender los trámites normales de los causantes, le será, al menos agobiante, la tarea de darle su RFC a los jóvenes apenas cumpla 18 años… ¿Es cierto que la nueva caravana que sale de Chiapas es por el retraso de sus trámites migratorios?… Desde la perspectiva de “la Comedia Humana”, advierte Honorato de Balzac: “la resignación es un suicidio cotidiano” …