Exactamente el sábado 11 de septiembre se llevó a cabo la inauguración del Primer Fragmento Urbano de Biodiversidad denominado Fragmento Urbano del Camellón Chabacano.
Dicho acontecimiento es un hito en la metrópoli ya que convergen varias circunstancias como, haber sido construido por el primer Comité Ciudadano de Conservación y Vigilancia de la Biodiversidad, es un proyecto también de coordinación institucional entre los órdenes de gobierno estatal (SDUOP), la Procuraduría Ambiental del Estado y la SEDESU, e instancias municipales como la Dirección de Ecología del Municipio de Corregidora, el FIQMA y en vivero del Cimatario, pero además participaron entidades académicas como la UAQ y la Universidad Politécnica de Santa Rosa Jáuregui, quien esta última, fue la responsable de aplicar el protocolo para poder emitir el primer Certificado de Biodiversidad al Fragmento Urbano.
Este hecho, expresa consustancialmente varios aspectos:
- Es un ejercicio del Derecho a la Ciudad, donde a partir de un espacio público como el camellón, los ciudadanos lo restauran y se apropian para disfrutarlo como un espacio de contacto social, de aprovechamiento por las especies comestibles y de mejora del paisaje urbano, ya sin contar los servicios ecosistemicos que brindará.
- Es una acción de restauración, conservación y aprovechamiento de la biodiversidad urbana basada en especies nativas del ecosistema local.
- Es también un acto de gobernanza socioambiental entre la SDUOP y la ciudadanía local, para co-crear conjuntamente alternativas ambientales a partir de una obra pública y la participación social.
- Marca por otra parte, el hecho de que la compensación ambiental con enfoque cuantitativo de 1 árbol por 15, ahora, se aplicó la compensación bajo una visión cualitativa, la de la biodiversidad con especies nativas, donde el rol fundamental son las funciones y servicios ambientales del Fragmento.
- Y por último, es el primer “sello verde” de biodiversidad al amparo de la Ley estatal de Biodiversidad, llevado a cabo por un tercero, que es una institución académica universitaria
Bajo todo este contexto, es como nace la prueba plena de la posibilidad de crear Fragmentos urbanos de biodiversidad basados en la participación, vigilancia y corresponsabilidad social para iniciar un gran movimiento de restauración de la biodiversidad en escenarios netamente urbanos.
Como parte de la agenda ambiental que vendrá en el futuro próximo, sin duda alguna estará la ecología urbana y dentro de ella, como una cuestión clave, la biodiversidad basada en especies nativas de los ecosistemas locales.
Los fragmentos constituyen las piezas de un gran mosaico urbano, que en su conjunto pueden hacer la diferencia. Sabemos que ya hay un parque industrial interesado en crear un fragmento y certificarlo, y así también, de buena fuente, les adelanto que el huerto urbano “Zona Viva” ya esta realizando las gestiones necesarias para lograr la certificación.