Hay mucha molestia entre los aficionados al futbol porque, oootra vez, los llamados Bono Gallos y los boletos para el partido de esta noche entre el Querétaro y León en el Estadio Corregidora están en manos de la reventa, provocando un encarecimiento artificial, independientemente de tratarse de una majadería para los eles seguidores del equipo. ¿Y las autoridades? Bien, gracias.
Agua puerca, ni de lejos ni de cerca.