Debido a la aparición de variantes más contagiosas de COVID-19, como es el caso de Delta, el retorno a clases presenciales está en duda en la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ).
La rectora Teresa García Gasca informó que se hará un nuevo análisis para determinar en qué momento es pertinente aplicar el protocolo de regreso.
Explicó que no pondrán en riesgo la salud de la comunidad universitaria y, aunque el estado se ubica en un semáforo verde (acorde a los parámetros nacionales) y en “escenario A” de los lineamientos estatales, la UAQ tiene a municipios como Querétaro y Corregidora en semáforo rojo.
Indicó que están listos con todos los protocolos, que implica que el regreso será gradual, con aforos limitados y acorde a lo que defina cada Facultad, esperarán un momento más oportuno para que esto ocurra.
Por ahora, priorizarán aquellas actividades que son esenciales y que no pueden desarrollarse de forma virtual, como es el caso de laboratorios.
“Cada facultad o la escuela de bachilleres definirá las estrategias académicas que implementará para nuestro regreso presencial; sin embargo, derivado de esta tercera ola de la pandemia, que hoy se presenta dada una nueva variante, más infecciosa, necesitamos tener el tiempo suficiente para definir en qué momento implementaremos nuestros lineamientos de reincorporación”.
