- Surge un movimiento en defensa del coso
- Sale de la cárcel el ex presidente de Colón
- Temen herencia de Granados en el TSJEQ
- Más de 4,800 muertos por el Coronavirus
¡Santa María!
Cuando derribaron -a principios de los 80- el Teatro Plaza, otro icono de Querétaro, le pregunté al urbanista Juan José Fernández Salazar -ex titular de Urbanismo con el gobernador Antonio Calzada Urquiza- si esa no era una construcción intocable y respondió que no, que era un edificio neoclásico con menos de 50 años de edad. A diferencia de la Plaza de Toros inaugurada hace casi 60 y que, como bien lo apuntó la directora del Centro INAH Rosa Estela Reyes García es un monumento artístico de gran belleza, digno de conservar. En su defensa ha surgido un movimiento de taurinos y no taurinos, interesados todos en preservar uno de los íconos de la ciudad.
Muchos queretanos todavía añoran el viejo cine sustituido por el cajón de una tienda horrorosa y lo mismo harán con la Plaza si se confirma su venta y demolición, a la que ya se oponen voces autorizadas, como la del cronista del Municipio y el Estado, Andrés Garrido del Toral, distinguido colaborador de este periódico, a pesar de no ser partidario de la fiesta brava, y piden la intervención del gobernador electo Mauricio Kuri y del presidente reelecto Luis Nava impedir la desaparición del coso construido por don Nicolás González Jáuregui en 1963.
La Santa María, además de su innegable valor arquitectónico y pieza grande del paisaje citadino, ha sido y es un importante centro de espectáculos y de encuentro de la queretanidad, junto con el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez y el Estado Corregidora, erigidos por el gobernador Rafael Camacho Guzmán, el Centro de Congresos y Teatro Metropolitano iniciados por Francisco Garrido y terminados por José Calzada y el Querétaro 2000 de Mariano Palacios, además de la Plaza Juriquilla de los hermanos Torres Landa y por supuesto -toda proporción guardada- el histórico Teatro de la República y el desaparecido Estadio Municipal de Ramón Rodríguez Familiar, reconvertido este año en “Olímpico” por Francisco Domínguez Servién.
La Santa María, obra del arquitecto Eugenio Urquiza Fernández de Jáuregui y la constructora Sigma, fue inaugurada el 22 de noviembre de 1963 con la actuación de los matadores Antonio del Olivar, Alfredo Leal y el español Miguel Mateo “Miguelín” con toros de la ganadería de Nicolás González Jáuregui, abuelo del actual propietario.
El aforo de la Plaza, calculado hasta para 12 mil espectadores, se ha rebasado en diferentes espectáculos artísticos, a partir de aquél primer concierto de Vicente Fernández, en 1982, a beneficio del asilo de ancianos “Luz al Ocaso” promovido por un grupo de señoras encabezadas por la profesora Maru Torres de Garfias.
Después del charro de Huentitán han pasado numerosos artistas por esa arena, incluidos Juan Gabriel, Joan Sebastian, Los Aguilar, Los Tí-gue-res del Norte, Mocedades y hasta Los Ángeles Azules, además de -por supuesto- los principales toreros: Calesero, Manolo, Curro, Eloy, Lomelín, Gutiérrez, Silveti, Benitez, Camino, Capea, Manzanares, El Juli, Zotoluco y las mejores ganaderías, como la de Garfias, Tequisquiapan, Xajay, Mimiahupan y Carranco, pero es sobre todo un centro de espectáculos y cultura en el que han estado interesados desde hace tiempo grupos empresariales de la capital del país (como los Herrerías, Alemán y Ramírez) y hoy empresas de comercio transnacional.
Independientemente de la importancia histórica, arquitectónica y artística de la Plaza, se trata de una propiedad particular ubicada en terrenos de alta plusvalía y, a no dudarlo, la familia González Aréstegui está en su derecho de venderla, pero eso no obsta para que diversos miembros de la sociedad queretana y los grupos interesados en la tauromaquia estén iniciando un movimiento para impedir su demolición. Y le puedo adelantar que el 9 de julio próximo se reunirán aquí diversos personajes nacionales para abanderar la defensa de la Santa María.
Esto apenas comienza.
-BLANCAS Y NEGRAS-
Ya salió.
Alejandro Ochoa Valencia, el ex presidente municipal de Colón preso por supuestos actos de corrupción, fue liberado el miércoles, quince días después de los comicios y de inmediato acudió al santuario de la patrona de la diócesis, la Virgen de Soriano, para postrarse ante su altar y dar gracias. Luego subió fotos y mensajes de red-ención al ciberespacio reprochando que todos lo olvidaran menos Ella.
El excarcelado, famoso por sus excesos y excentricidades, electo y reelecto por obra y gracia de sus patrocinadores que hasta se lo llevaban a Europa acompañado de novia o familia, se sintió con patas para gallo y quiso disputar la candidatura a gobernador dándole de patadas al pesebre y vaticinando la derrota del PAN. Es cierto eso de que el poder los vuelve locos. Al final el perdió su libertad y su partido el municipio.
Lo que viene es la renovación en la presidencia del Tribunal Superior de Justicia de Querétaro, decisión que recae formalmente en los 13 magistrados pero generalmente con la inspiración del gobernador en turno, en este caso el siguiente. En rigor hay 12 posibles para la presidencia, con excepción del actual Antonio Ortega Cerbón por no haber reelección inmediata.
Este relevo resulta especialmente interesante porque no hubo alternancia política en el estado y algunos creen en la extensión del poder. Hay de todo entre los integrantes de nuestro Poder Judicial, pero hoy la incógnita es si se designará -elegirá, perdón- a un juzgador de carrera, un neojurista o, sin ningún pudor, a la señora esposa del todavía secretario de gobierno que ya comenzó su promoción en la prensa afín. No todas las herencias suman.
La muerte. En el último año han fallecido más de 4,800 queretanos a causa de la pandemia, entre ellos el maestro Manuel Ramírez “El Charol”, fundador de imprentas de periódicos y el presidente de los bomberos David Vallarino, amigos muy queridos, así como por otras causas el ex alcalde Jorge Torres Vázquez y uno de mis compañeros de la infancia, el general Juan José Retes Razo. De eso charlábamos ayer con el doctor Edmundo González Llaca, ambos “sobrevivientes de los de antes” y sin temor a la muerte porque “tiene olfato de perro; si te siente el miedo ¡te muerde!”
Más allá de esta época negra del Covid-19, hemos visto partir a muchos compañeros. Precisamente el próximo lunes se cumplirán 12 años del fallecimiento de Ezequiel Martínez Ángeles, El Urbanita, narrador crítico de los acontecimientos políticos en columnas periodísticas y en su programa a Micrófono Abierto, transmitido por más de 25 años por Radio UAQ. Cheque ya no pudo ver el arribo de su colaborador José Calzada Rovirosa al gobierno ni la entrega del poder a Francisco Domínguez Servién y la elección de Mauricio Kuri González, como tampoco los triunfos de los presidentes Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador. Aunque tengo para mí que le habría gustado más ver los premios nacionales de dramaturgia y novela de su hijo Imanol. También le hemos dicho adiós en estos años, entre otros, a Luis Roberto Amieva, Rogelio Garfias, Miguel Bringas e Inocencio Reyes o políticos de la talla de Antonio Calzada Urquiza que con su desaparición dejó como decano de los gobernadores a Mariano Palacios Alcocer.
Mientras tanto, avanza la vacunación en la entidad con la incorporación de los cuarentones entre las personas con derecho a merecer su biológico. Un ejército de bienestar, mujeres y hombres, llámeles servidores de la nación, brigadas correcaminos, enfermeras y médicos del sector salud, elementos del Ejército y voluntarios participan en el proceso para proteger a los queretanos del maldito bicho.
La acción que debiera unir a todos como sociedad, de pronto se enfrenta a la estupidez humana (no puede llamársele de otra manera) de empresas que no permiten a sus trabajadores acudir a inocularse, como las coreanas JK Donga, HK Donga y Daiwood que -dijo una afectada, cuyo nombre me reservo por obvias razones- les niegan el permiso o descuentan el día. ¡Miserables!
LA FRASE
DE LA SEMANA
A propósito
de la muerte.
“Una vez terminado el juego, el rey y el peón vuelven a la misma caja”: Proverbio italiano.
-JUGADA FINAL-
Vivos.
A quienes quierenhacer la pinza entre la Fiscalía y el Tribunal para el manejo de los asuntos de justicia, un transexenal y aspiracionista ¡JAQUE
MATE!
