El título de esta columna es de Yolanda Vargas Dulché. Pero es también una síntesis de lo ocurrido en México, al menos en las actividades presidenciales, de la semana pasada para acá.
Lágrimas de quienes perdieron familiares en el derrumbe de nuestra incomparable obra pública de la Línea Dorada.
Risas, de quien en carajudo (y corajudo) desplante desestimo una visita a los hospitales o las casas de las víctimas (al menos alguna de ellas; porque eso significaba caer en el juego de los hipócritas neoliberales, cuyo estilo no es propio de este momento) y así, entre maldiciones y me río de ellos, se vivieron los días de un luto por decreto, lo cual es una orden de cuando y por cuanto tiempo se alberga la pena. Después de eso la bandera a todo trapo. Tres días.
Pero después de todo esto viene el único sentimiento humano con valor divino: el amor. Y si es el amor a la madre o de la madre, pues mejor.
Y para auxiliar al edípico país de las madrecitas santas, madrecitas buenas; cabecitas blancas (las otras), los asuntos nacionales se quedan en suspenso, al menos en la conferencia matutina de cada día, sostén y vitrina de la presente transformación nacional, porque ayer era día de amor, puro amor.
Pero no el amor de quien brinda por su madre como el bohemio arrebatado cuando sacude su melena alborotada y dice versos de inspirado acento. No, con el amor de eterno de Juan Gabriel nos basta y sobra.
Gracias a esa actitud musical presidencial, hoy se puede escuchar íntegro su verbo ejecutivo. Su más breve intervención jamás lograda en el escenario (nunca mejor dicho) del Salón Guillermo Prieto del nuevo “Palacio (auditorio) Nacional”.
“… esta conferencia, esta mañanera va a ser especial, no vamos a informar nada, no vamos a contestar preguntas de ustedes, porque las mamás son primero. Entonces, es un día muy especial y queremos ofrecer a todas las mamás un festival. Hoy, día de las madres, la mañanera va a ser un festival para todas las mamás y vamos a llevar a cabo este festival.
“Estoy hablando más despacio que de costumbre para que las mamás se sienten, se acomoden, vean la televisión, el internet, escuchen el radio, por el medio que sea, porque va a ser un festival inolvidable con Eugenia León, una mujer, una cantante excepcional, llena de arte y sentimientos.
“Eugenia León con nosotros y todo, todo, todo dedicado a las madres.
“Felicidades y le dejamos el escenario a Eugenia León”.
Pues sí. Sólo faltó decir, y aun hay más, porque ya las madrecitas santas, madrecitas buenas, estaban sentadas y alborozadas frente a sus televisores, tabletas o computadoras. Alguna estaría siguiendo la ”mañanera” con su teléfono celular en su recorrido por las etaciones aun intactas del Metro. Otras en la “micro” quien sabe.
Pero cuando se trata de la madre no hay asunto de mayor importancia ni tema sobresaliente
Todo sea por la que nos amó antes de conocernos y en algunos casos lo siguió haciendo a pesar de conocernos, porque en este mundo hay tanto hijo mal portado, como usted no tiene idea.
O a lo mejor la tiene, pero el diez de mayo, fecha instituida por un periódico nacional, por cierto, de cuando los diarios no eran enemigos de la patria ni del régimen, sino fieles intérpretes de los sentimientos populares. Por eso ya hace muchos días el Señor Presidente amenazó a los malandros con acusarlos con sus jefecitas.
Pero la verdad, comadrita, cómo canta bonito Eugenia León.
TLANE
Si las tendencias y sondeos se confirman, Billie Uribe, candidato de “FuerzaXMéxico”podría ganar la alcaldía de Tlalnepanta (una de las más importantes poblacional y económicamente del estado de mMéxico) en su primera aparición electoral de importancia.
Pedro Haces Barba, coordinador de los candidatos, de “FxM” , manifestó en una reciente reunión cómo las líneas fundamentales de esta oferta política (mujeres, seguridad, atención a los jóvenes, vivienda, empleo), han acercado a Uribe con los electores de una manera hasta sorpresiva.
“…va a ganar nuestro candidato; un joven que tiene la voluntad, que tiene todo lo que se necesita, y es un joven que va a quitar a los políticos que han venido gobernando Tlalnepantla trienio tras trienio …”, remató Haces Barba,
“Ni la lluvia nos va a parar, estamos listos para ganar las próximas elecciones del 6 de junio y pintar de rosa el Estado de México”.