SABINO MEDINA
A Pancho Domínguez, el gobernador de Querétaro, no le convenía nada un candidato a gobernador de Morena como Gilberto Herrera Ruiz, simple y llanamente porque siempre le fue un Rector de la UAQ incómodo. Lo anterior nos lleva a otros porqués y motivos, que se relacionan con los intereses de la especulación de la obra pública, que el actual gobernador maneja y se empeña en englobarlos como parte de los réditos suyos.
Vayamos por partes: El gobernador siempre estuvo atrás de las huelgas y de quienes desde dentro y de fuera de la UAQ, las impulsaron. Esta fue la estrategia de siempre para desgastar al gobierno de José Calzada Rovirosa.
De la misma manera actuó con el transporte público. Desde luego, entonces, contaba con el respaldo de Ernesto Cordero y ahora se sabe que del señor Kors (Osorio Chong) a la sazón Secretarios de Hacienda y de Gobernación, respectivamente, en pago político a su incondicionalidad de grupo con el resto de Senadores a que alude el caso Lozoya, abreviando detalles, de los prolegómenos de la Reforma Energética, de que mucho se hablará ahora y en el futuro.
Francisco Domínguez, ya encaramado en el gobierno de la entidad, llegó a expresar que a Gilberto Herrera Ruiz, no lo aceptaría como delegado general, aunque se lo pusieran y condicionó su presencia en las reuniones de seguridad a donde muy poco asiste el propio mandatario.
Ordenó que se calumniara el ex rector, atribuyéndole manejos contables del presupuesto de la UAQ y tuvo a su servicio, como sicario vigilante de sus caprichos al todavía ahora secretario de educación estatal, como su ex protector fungiendo como secretario general de gobierno, Alfredo Botello, hoy senador suplente y pieza clave de los enclaves estatales desde hace varios sexenios.
El gobernador fracasó en su intento de imponer en la Rectoría de la UAQ, al entonces director de la Facultad de Contaduría, pero su representante, ante el Consejo Universitario, siguió rigiendo como SU representante incondicional de los apetitos fiscales y del contratismo SUYO, al mismo senador suplente Botello.
¿De qué maniobras palaciegas y extra palaciegas se ha valido Pancho Domínguez? Recientemente se produjo un robo a las Oficinas de Bienestar Social y las autoridades locales, empezando por el gobernador, hacen como si nada hubiera acontecido, ni se investiga de la misma manera que se hace con el cuantioso saqueo del huachicol. De esto y de otras muchas cuestiones hace como que no se da cuenta el señor gobernador de Querétaro; pero sí ha estado presto al doble juego de calumnias y despropósitos publicitarios acerca de las acciones y competencias federales, que giran en contra de sus intereses y de sus propósitos de heredar en el poder estatal a uno de sus más cercanos, que ya todo mundo conoce, por la promoción oficial que se le hace desde el poder local.
Por eso el resultado de la pretendida encuesta de Morena, le supo a miel, por lo menos hasta ahora y es seguro que Don Pancho Domínguez, no estuvo quieto ni con las manos cruzados, para que el “resultado” fuera tan claro como los porcentajes del presupuesto estatal entregado a la UAQ, donde tantos más cuantos millones obran en cifras cerradas de dineros y un resto de obras, esto es en especie, como en las tiendas de raya del régimen feudal de las haciendas.
Mucho hay que analizar y más revelaciones vendrán de mayor peso y calibre.
Al tiempo.