- Todavía no se cumple el testamento del padre del CU
- Gilberto Herrera se registrará mañana sábado en Morena
- Apoyarán Murguía y Anaya la candidatura de Mauricio Kuri
- La diferencia en el 2021 puede estar en las coaliciones
Irrepetible.
El próximo sábado 12 de diciembre se cumplirán cien años del natalicio de uno de los personajes más importantes del siglo XX queretano: José Guadalupe Ramírez Álvarez el eminente catedrático, historiador, cronista, periodista y abogado José Guadalupe Ramírez Álvarez, autor de más de 20 libros imprescindibles sobre la historia local y nacional. La efeméride da oportunidad a este columnista de enmendar su omisión de hace ocho días al mencionar a los principales tribunos del estado, en el marco del Tercer Concurso Interuniversitario de Oratoria y Debate celebrado en el Centro Universitario, obra magna del también ex rector, dueño de gran cultura y del don de la palabra, que hacían juego con su magnífica voz, recursos empleados brillantemente para convencer al presidente Luis Echeverría Álvarez de la necesidad de construir el campus.
La obra que se levanta en el Cerro de las Campanas, magnífica e imperecedera, se debe sí al apoyo y acuerdo del gobernador Juventino Castro Sánchez pero sobre todo al discurso pronunciado ahí mismo por el maestro José Guadalupe Ramírez Álvarez el 15 de mayo de 1972 ante el primer mandatario. Que así como Juárez, le dijo, ordenó lanzar fuego y metralla en esa colina, para acabar con Maximiliano y su imperio, “a él, Luis Echeverría, le correspondía ordenar que se lanzara cemento, arena, cristales, hierro, para construir aulas, porque ahí se iba a hacer nuevamente México”.
Ante tan sugestivo argumento, Echeverría -hoy decano de los presidentes, a sus 98 años- aceptó la provocación y el 20 de septiembre de ese mismo año recibió a los representantes de alumnos y maestros de la UAQ en Los Pinos. Todavía ahí, como si no fuera suficiente, don Guadalupe expuso que la máxima casa de estudios tenía tres mil alumnos y una superficie de seis mil metros cuadrados, dos metros por estudiante, como en los panteones.
El presidente lo interrumpió: “ya no necesita…ya no me diga más. Va a tener todo”.
Y al modo: ¿Traen los planos? Sí.
¿Tienen los presupuestos? Sí.
¿Cuándo podemos empezar?
Mañana.
¡Empiecen mañana!
La espléndida anécdota nutre el libro “El estilo personal de gobernar” de Daniel Cosío Villegas y es suficiente para reconocer la aportación de José Guadalupe Ramírez Álvarez, que en el proyecto de memorias dictadas a su discípulo Pedro Jesús Montiel Cárdenas (+), afirmó orgulloso: “Porque indiscutiblemente, aunque lo nieguen, aunque lo que sea, han sido obra mía, el Centro Universitario y los periódicos de Querétaro, Amanecer y Diario”.
Así quedó también registrado en la semblanza escrita por este columnista para el segundo tomo de la colección de libros “Querétaro en el siglo XX, personajes de la vida cotidiana”, editados en el año 2013 por la administración del gobernador José Calzada Rovirosa con la coordinación del cronista Andrés Garrido del Toral y del secretario técnico del gobierno, Juan Antonio Isla Estrada.
Tarea grata y sencilla siendo Ramírez Álvarez -hoy inquilino del Panteón de los Queretanos Ilustres- uno de nuestros personajes favoritos, imprescindible no para contar la centuria pasada sino para entender la queretanidad.
Muerto la mañana del domingo 18 de mayo de 1986 a los 66 años a causa de una leucemia que la maledicencia catalogó como Sida, José Guadalupe era el último de 12 hermanos y guadalupano por destino (nació, como le contaba antes, el 12 de diciembre de 1920, hace ya casi un siglo) el primer cronista estatal de Querétaro, que recibió esta encomienda, “la más bonita de todas”, del gobernador Antonio Calzada Urquiza.
Y es que la historia según Ramírez Álvarez se construye a partir de documentos y narraciones cuestionadas por la racionalidad, como la versión romántica sobre la fundación de Querétaro, con todo y el Apóstol Santiago trotando en el cielo mientras se trompeaban españoles e indios en una pelea arreglada por el comerciante Conín.
Sin embargo, sus textos escritos entre 1946 y 1986, nutren aún a los estudiosos para conocer a doña Josefa Ortiz de Domínguez, incorporada a la ceremonia del Grito por el presidente José López Portillo a sugerencia suya y recientemente invocada por Andrés Manuel López Obrador en las primeras fiestas patrias de la pandemia, o para penetrar en los rincones del “Teatro de la República, aula magna del derecho social”.
José Guadalupe Ramírez Álvarez, víctima de habladurías que él alentaba y desafiaba por su estilo de vida incompatible con las reglas tradicionales, no ocultó nunca amores, rencores, devociones y orgullos. Era queretano, guadalupano, barroco y periodista. Bajo esas divisas creó y dirigió el periódico Amanecer, enfrentándose al gobernador Juan Crisóstomo Gorráez en el movimiento del 58, hasta la obtención de la autonomía universitaria. Más adelante, en 1963, fundaría y digiría Diario de Querétaro, hasta la ruptura, dos años después, con el mandatario en turno, Manuel González Cosío, luego de organizar la fiesta de coronación de Xóchitl, un conocido homosexual.
Y, finalmente, el fallido intento de hacer su propio periódico. No le faltaron ni inteligencia ni equipo, sólo el papel, controlado por la paraestatal PIPSA. Entonces, como ahora, los gobernadores pretenden mandar en los medios, desaparecer a los críticos y refundar Querétaro cada sexenio
Artífice de su historia y personaje indispensable del siglo XX queretano, José Guadalupe Ramírez Álvarez, hijo de un modesto cambayero de San Miguel de Allende, Guanajuato y de una mujer que vendía tamales y atole, predijo en un texto premonitorio “después de todo, algo de mi superará la muerte”.
Generoso heredó la mayor parte de sus propiedades, incluidas la casona de Escobedo y la finca de La Cañada, a la Universidad Autónoma de Querétaro. En el testamento, aún incumplido, dispuso la creación de un fideicomiso para becar a estudiantes en derecho, historia y periodismo, lo que 34 años después -por omisión o corrupción- no ha ocurrido.
Cuatro días antes de morir, escribió resignado: “Pues nací, la muerte mora en mi”.
Este sábado 12 de diciembre, de mañana en ocho, se cumplirá un siglo de su nacimiento.
Es tiempo de hacerle justicia.
-LA VIEJOTECA-
Otros datos.
En la última entrevista concedida por el ex gobernador Juventino Castro Sánchez a este reportero y publicada el viernes 29 de abril de 2005 en Diario de Querétaro, contó haberle propuesto al presidente Luis Echeverría sacar del Cerro de las Campanas la feria ganadera, porque no era posible que la estatua de Benito Juárez estuviera rodeada de corrales con animales y le propuso el mayor centro de cultura, el Centro Universitario. Se construyó al final de su gobierno (1967-73) pero no lo dejaron inaugurarlo. “Me castigaron” dijo en corto, por diferencias con su sucesor, el arquitecto Antonio Calzada Urquiza.
La política es así.
-BLANCAS Y NEGRAS-
Sabadazo.
Gilberto Herrera Ruiz, senador de la República y ex súper delegado federal, se registrará mañana en la sede nacional de Morena como posible candidato al gobierno estatal y se someterá a la encuesta prevista en la convocatoria lanzada por el comité encabezado por Mario Delgado. En el ex rector de la UAQ tiene la 4-T su mejor carta para disputar por primera vez la gubernatura de Querétaro, la única que la mayor parte de las encuestas y análisis políticos no le pronostican al partido del presidente Andrés Manuel López Obrador porque es, junto con Guanajuato, gran bastión del PAN.
Podrían solicitar registro dos o tres aspirantes más, como el senador suplente Juan José Jiménez Yáñez, que miró para arriba y trae una brigada de amigos promoviéndolo en las redes sociales y en algunos medios locales. Igualmente ha declarado su interés de participar la diputada federal Beatriz Robles, pero está enclaustrada a causa del Covid, como lo reveló ayer El Armero en su columna. De cualquier manera se espera que antes de la Navidad haya humo blanco.
En Acción Nacional nadie duda de la postulación de Mauricio Kuri González, el coordinador de su bancada en el Senado de la República, que trae ya años de campaña y todo el apoyo para retener la gubernatura, con la posibilidad de -contra lo que había dicho el dirigente nacional Marko Cortés- armar una coalición con otras fuerzas y hasta alianzas informales con rivales tradicionales o partidos nuevos que legalmente están impedidos. El ex presidente municipal de Corregidora y de la Coparmex es muy buen candidato.
Es evidente el acuerdo entre los grupos principales del PAN, a pesar de la inconformidad de los ex alcaldes capitalinos Armando Rivera Castillejos y su discípulo Marcos Aguilar Vega, antagónicos ambos al proyecto del gobernador Francisco Domínguez Servién. La verdad es que los únicos que podrían disputarle la postulación a Kuri son la vicepresidenta del Senado, Guadalupe Murguía Gutiérrez y el ex candidato presidencial Ricardo Anaya Cortés que lo apoyan junto con los presidentes municipales Guillermo Vega Guerrero, Enrique Vega Carriles y Roberto Sosa Pichardo, al igual que Luis Bernardo Nava Guerrero.
Y a propósito de coaliciones, el presidente de Morena Mario Delgado adelantó que el lunes próximo tendrá una mesa de diálogo con el Partido del Trabajo y el PVEM para definir si irán en alianza a nivel federal “mientras que a nivel local siguen los diálogos”. En el caso de Querétaro el PT anda suelto y el Verde parece decidido a ir solo, con El Arquero de Cristo Adolfo Ríos a la presidencia municipal de Querétaro y una candidata joven y de sociedad para la gubernatura, cuyo nombre el líder estatal Ricardo Astudillo Suárez mantiene “in pectore”.
En cuanto al Partido Revolucionario Institucional, ahora tercera fuerza, no queda claro si hará “alianzas no convencionales” como nos adelantó el líder nacional Alejandro Moreno “Alito”. El presidente estatal Paul Ospital Carrera -que quiere la candidatura al igual que Hugo Cabrera Ruiz y Ernesto Luque Hudson- ha negado cualquier acuerdo con el PAN, pero ya se sabe que en los partidos el jefe siempre hace mayoría.
Igualmente habrá que ver el papel del único partido local, Querétaro Independiente en donde se ha privilegiado la participación ciudadana y especialmente de las mujeres. La presidenta y diputada local Connie Herrera Martínez está sumando posibles candidatos de la llamada sociedad civil, pero no se descarta que pueda unir fuerzas a favor del abanderado del PAN, Mauricio Kuri González, con quien se reunió en días pasados.
Cosas veremos.
-LA FRASE DE LA SEMANA-
Covidad.
Para nosotros Querétaro ya está en Semáforo Rojo: Silvia Rivera Hernández, dirigente estatal del Sindicato Nacional de Trabajadores de Salud. Plaza de Armas, miércoles 2 de diciembre de 2020.
Pero hay un Dios.
-JUGADA FINAL-
Gambito.
A los que por indiferencia o complicidad no han cumplido el testamento del licenciado José Guadalupe Ramírez Álvarez, nacido hace 100 años y muerto hace 34, un infiel y tardado ¡JAQUE MATE!