Sin poder mantenerse erguido por el intenso dolor, al hospital del ISSSTE arribó un paciente junto a su esposa. El pronóstico no era nada alentador. Sus familiares sabían que tenía cirrosis hepática y un tumor en el hígado. Aquel domingo, la pareja se quedó esperando por horas para recibir atención médica. No había doctores. Ni siquiera los de guardia. Fue así que en medio de la desesperación, decidieron llamar a Claudia Medina Meza, quien además de sus 26 años de servicio a la institución, cuenta con especialidades en Hematología, pediatría y la licenciatura en Cirugía.
Para cuando la doctora llegó al nosocomio, confirmó que no había un solo galeno que pudiera prestar auxilio al hombre. Entrevistada por PLAZA DE ARMAS, reconoció que el pronóstico médico para el paciente identificado como J.D. Rangel, no era alentador pues prácticamente llegó en fase terminal. Lo que genera indignación y coraje en la Doctora, es que no se tratara al enfermo con prontitud pero sobre todo con dignidad y empatía al inmenso dolor ajeno.
Y es que relató que de haber aplicado los protocolos en tiempo y forma, se habría mitigado el sufrimiento e incluso, podrían haber prolongado su existencia “Era algo que tenía que hacerse, era como tirar una moneda al aire”. Las palabras de la esposa se quedaron grabadas en la Doctora Claudia “ Yo se que mi esposo estaba ya muy enfermo y grave. Que probablemente iba a morir. Pero lo hubiera hecho con dignidad, con atención médica y no en medio de mi desesperación de andar buscando a los médicos que nunca encontré”.
Sabiendo todo el valioso tiempo que se había perdido, la Doctora Claudia Medina se apresuró a aplicar los procedimientos que le permitieron a J.D. Rangel disminuir su dolor y sobre todo, poder respirar. Una vez estabilizado el paciente, dejó instrucciones precisas al personal de enfermería que debían ser transmitidas -cuando decidieran presentarse- a los médicos de guardia.
Para el lunes 5, la Doctora Claudia recibió una segunda llamada. Sus colegas del ISSSTE aún brillaban por su ausencia y la condición del señor Rangel había empeorado. Entonces, decidió llamar al director del hospital, Silvio Rosales Flores a quien le expuso la delicada situación que prevalecía en el nosocomio. La máxima autoridad al interior del hospital, se comprometió a tomar cartas en el asunto.
Claudia Medina volvió aquella madrugada al ISSSTE y detrás de ella, apareció finalmente el médico tratante para intubar al paciente quien luego de 24 horas de dolor infernal, murió.
Lejos de recriminar a los médicos ausentes, el director del ISSSTE Silvio Rosales le advirtió a la Doctora Medina que sería objeto de una sanción por atender a un paciente que no le correspondía y además, acudir al hospital fuera de su horario. La corrieron sin notificación alguna. Y quienes brillaron por su ausencia durante el martirio que pasó el Sr. Rangel, continúan en su cargo como si nada hubiera ocurrido “Ellos están felices. Yo que acudí a resolver la emergencia, soy ahora la mala del cuento. Eso de acudir a las 2:00 de la mañana cuando todos están dormidos y poner a los médicos a trabajar, no se donde estaban. El médico no estaba en su lugar de trabajo”, lamentó la Doctora Claudia.
Por si fuera poco, la Doctora Claudia acusó que el médico internista se enteró del hecho a las 9 de la noche y sin embargo, no le dio seguimiento. Al galeno encargado del área de terapia intensiva, tampoco le incomodó mayormente la situación. Y es que la doctora Medina Meza explicó a PLAZA DE ARMAS que el tratamiento de aquellos pacientes en condiciones grave, es “Dinámico”. Ello implica que deberán ser monitoreados constantemente en sus signos vitales y actualizar las indicaciones de acuerdo a la evolución o retroceso que muestre el enfermo “Me pareció un total abandono del paciente. No hubo seguimiento adecuado. Quizás si hubiera estado su médico de guardia, el paciente no hubiera muerto”.
La Doctora Medina, reconocida Hematóloga, Pediatra y Cirujana, exhortó a la Fiscalía General a que se haga una exhaustiva indagatoria sobre las causas que llevaron a la muerte al Sr. Rangel. Y es que a pesar de que el diagnóstico parecía poner todo en su contra, para la Doctora el manejo de los medicamentos jugó un rol fundamental. En concreto, habló de la manera en que se le suministró el Midazolam, una benzodiazepina que en combinación con otros fármacos, ayuda a que el paciente se adapte mejor al respirador artificial. Como lo explicó ampliamente durante la entrevista con PLAZA DE ARMAS, entre los múltiples efectos del Midazolam está el hecho de que disminuye la frecuencia cardiaca “Es un paciente que estaba ya muy delicado y en fase terminal. Una vez que se intuba el paciente, nosotros suministramos un medicamento para sedarlo y que el paciente se deje llevar por el ventilador. Ponemos una dosis estándar de Midazolam y un relajante muscular. No hay ni una sola nota de como estuvieron manejando al paciente con estos medicamentos que son extremadamente delicados y que tienen que estar monitoreándolo cada hora”.
Profundizando en los últimos momentos de la vida del paciente J. D. Rangel, la Doctora Claudia afirmó que según el reporte médico, su frecuencia cardiaca comenzó a decaer. Como en el pico de la crisis, no había médicos presentes. Unicamente estaba un ESTUDIANTE RESIDENTE de medicina sobre quien dejaron toda la responsabilidad. Relató que el residente, dio parte al personal y alguien, ordenó incrementar la dosis de Midazolam “De 5 ml de infusión de Midazolam, lo suben hasta 15 ml. Es una diferencia abismal y obviamente en ese momento lo tronaron. Esa es mi hipótesis como médico. Si el paciente presentaba bradicardia (Descenso de la frecuencia de contracción cardiaca) ¿Quien le tiene que andar subiendo la dosis de Midazolam. Es una contraindicación. Si el paciente trae la frecuencia a la baja y tú le subes la dosis, obviamente va a caer en paro”.
“De 5 ml de infusión de Midazolam, lo suben hasta 15 ml. Es una diferencia abismal y obviamente en ese momento lo tronaron”
Claudia Medina, advirtió que esto no termina con su separación del ISSSTE y la muerte del Sr. Rangel. Acotó que además de la Fiscalía, la Comisión Nacional de Arbitraje Médico deberá hacer su propia investigación y actuar en consecuencia. Con una vida sirviendo a la institución, la Doctora Claudia ha visto como en los últimos años, una institución noble y referente como lo fue el ISSSTE se va en picada “Soy testigo. He visto como nuestras últimas autoridades en tres años, va en picada. No tenemos elevadores. Solo funciona uno y cuando este se descompone, es un verdadero caos porque no podemos mover a los pacientes”. Aún cuando el Hospital del ISSSTE luce imponente desde la calle, ni siquiera cuentan con un tomógrafo que sirva y ello cobra mayor relevancia al ser una útil herramienta en el monitoreo de los pacientes infectados por el Covid-19 “Hay que estarles haciendo tomografías en el tórax a los pacientes para ver que tan comprometidos están sus pulmones y no tenemos tomógrafo. No hay insumos para evitar que el personal se contagie. Varios compañeros se han infectado porque nos restringen guantes, mascarillas y muchas cosas. No hay medicamentos, ni personal médico y de enfermería. Ni siquiera hay jabón quirúrgico. Estamos en total decadencia”, lamentó la Doctora Claudia.
Como lo experimentó en carne propia, quienes se atreven a denunciar o levantar la voz en el ISSSTE, son objeto de fuertes represalias por parte del actual director Silvio Rosales Flores. La Doctora Claudia Medina dice tener un profundo amor por la institución. Desde afuera, lamenta que los funcionarios a la cabeza no cuenten con el perfil necesario para tal responsabilidad. Tal es el caso del sub delegado Marcos Chávez Narváez quien cuenta con procedimientos por desfalcos millonarios en el estado de Guerrero y es acusado de haber formado parte del equipo de la Secretaría de Salud del estado de Guerrero que generó un déficit de 5 mil millones de pesos en aquella entidad, dejando inoperante al sistema de salud.
Advirtió que llegará hasta las últimas instancias para que se haga justicia por el paciente y en defensa de su prístina trayectoria en la institución pública. Dijo que a la delegación del ISSSTE en Querétaro, el mandato del Presidente López Obrador en el sentido de eliminar la corrupción, no ha llegado. Lejos de ello, comentó, los verdugos se encuentran acosando y a la caza del personal que consideran estorbo u amenaza a sus intereses. Por último, la Doctora Claudia aconsejó a los derechohabientes a no caer en el hospital durante los fines de semana “No hay médicos, sin personal. No hay nada. Es preferible no estar ahí los fines de semana”. No sabe como terminará su litigio. Se dijo dispuesta, si lo determinan las autoridades laborales, a ser reinstalada en la institución, siempre y cuando se haga una limpieza al interior, pues sabe de lo que son capaces de hacer el director y el subdelegado con tal de remover a quien se les ponga por delante.
Claudia Medina, acusó que el poderoso sub delegado, fue quien designó al director del hospital Silvio Rosales Flores “Es otra persona que no conoce la Institución. No sabe cuales son sus debilidades ni fortalezas. Lejos de motivar a la gente comprometida, ve lo que nos hacen”. Añadió que el personal médico, trabaja bajo acoso y temor constante por parte del subdelegado y el director del nosocomio. Por ello, no le extraña que sus compañeros hayan preferido mirar a otro lado cuando se fueron contra ella. Es más, comentó que su caso no es el único. Refirió que han estado acosando laboralmente a otras compañeras para que renuncien a puestos de confianza y poder meter gente afín a sus intereses “A una compañera de trabajo que tiene 30 años en el ISSSTE, súper comprometida. Llegaba a las seis de la mañana, una hora antes de su horario y se iba a las seis de la tarde, dos horas después de su salida, el director la presionó para que tramitara su jubilación para meter a una incondicional. Con ese tipo de personas estamos trabajando. Trabajamos bajo amenazas con autoridades de terror”.
Parte de las irregularidades que ha dejado Chavez Narváez a su paso por administraciones públicas, están reflejadas en el Diario Oficial de la Federación(27/8/2020), (DGRRFEM-B-0094/20) donde se le señala como presunto responsable del daño al Estado de Guerrero en su hacienda pública federal, por un monto de 20 millones 562 mil 325 pesos con 69 centavos; además de ser denunciado por trabajadores del sector salud por persecución laboral y abuso de poder en la Secretaría de Salud “Al C. MARCOS CHÁVEZ NARVÁEZ, que durante su desempeño como Subdirector de Recursos Humanos de la Secretaría de Salud del Estado de Guerrero, encargado de supervisar y vigilar la exacta aplicación de los mecanismos y lineamientos para la selección y contratación del personal que laboró en la Secretaría de Salud del Estado de Guerrero, omitió vigilar y controlar los diferentes sistemas de remuneración al personal, ocasionando que se destinaran recursos de PROSPERA Programa de Inclusión Social Componente Salud 2015, para el pago de un prestador de servicios eventual que carece de la documentación que acredite el puesto y la profesión bajo la cual cobró durante el ejercicio fiscal 2015; pagos posteriores al personal que causó baja; pagos a 18 prestadores de servicio eventual de los cuales no se acreditó que contaran con los contratos individuales de trabajo; pagos a 23 trabajadores de los cuales no se formalizó debidamente la relación laboral; y no se presentó evidencia documental del entero del Impuesto Sobre la Renta retenido a los trabajadores, al Servicio de Administración Tributaria, mismos que no han sido reintegrados a la Tesorería de la Federación, con lo que se considera que causó un probable daño al Estado en su Hacienda Pública Federal por un monto de $20,562.235.69 (VEINTE MILLONES QUINIENTOS SESENTA Y DOS MIL DOSCIENTOS TREINTA Y CINCO PESOS 69/100 M.N.), más los rendimientos financieros que se hubiesen generado desde su disposición hasta su reintegro a la Tesorería de la Federación, como se encuentra soportado con el expediente técnico del Dictamen Técnico número DGS”A”/DTNS/1225/2019, conducta irregular que de acreditarse, constituiría una infracción a lo dispuesto en los artículos 77 bis 5 inciso B fracción III y 77 bis 16 de la Ley General de Salud: cláusulas quinta del Convenio Específico de Colaboración en Materia de Transferencia de Recursos para la Ejecución de Acciones de PROSPERA Programa de Inclusión Social, Componente Salud 2015, que celebran la Secretaría de Salud y el Estado de Guerrero; 24 de la Ley Federal del Trabajo; párrafo último de los contratos individuales de trabajo por tiempo determinado elaborados para el ejercicio fiscal 2015 y, 96 de la Ley del Impuesto Sobre la Renta”, se lee en el documento.