En la primera parte de esta entrega expusimos lo más sobresaliente del V Informe en términos ambientales, ahora toca plantear una reflexión.
En principio, cabe hacer notar, que el tema principal ambiental, son las acciones frente al cambio climático y sobre todo, del sector que más emite emisiones (el transporte), con lo cual, se dice que por el tipo de transporte a gas natural se dejarán de emitir una cantidad anual de 19,337.79 t de CO2 equivalente anuales, pero en donde más se logra una reducción es en sector ganadero, con la adopción de un modelo de ganadería holística con 40 mil t de CO2 en emisiones anuales de las excretas de 21,450 cabezas de ganado, cuyo carbono ahora se fija en el suelo, no obstante, hubiese sido oportuno que nos brindarán la cifra total de emisiones, su tendencia y las emisiones per cápita, para saber cuál es el impacto real que se tuvo.
El otro rubro destacado corresponde al de la eficiencia energética, muy relacionada con las acciones contra el cambio climático, pero también, con la competitividad pues la intensidad energética nos remite a la relación de cuánto $ pesos por kilowatt se invierte en un proceso productivo en la actualidad y por ello, la eficiencia energética resulta crucial, pero de nueva cuenta nos quedaron a deber información de las acciones que realiza el Hub de tecnología y energía, sobre todo en el sector industrial.
Y en materia de agua, fue el rubro con menos información y denota un avance bastante reducido, en tanto, que no se informa sobre el avance en el porcentaje de agua tratada, la disponibilidad de agua por persona y región o municipios actual, el déficit de las aguas subterráneas y las acciones de captación de aguas pluviales, indicadores todos ellos claves en la materia.
Por otra parte, lo que se informa sobre la aplicación y observancia de la justicia ambiental, es relevante pues casi hubo una acción por día y las resoluciones con algún tipo de infracción equivalen al 29.57% del total de las visitas de inspección. Lo anterior nos conduce a reflexionar que existe la vigilancia y la atención a las denuncias ciudadanas. Y basta con recordar que hubo clausuras a dos empresas en materia de emisiones a la atmósfera en el presente año. Aunque hubiera sido valioso saber en qué sectores y cuáles son las infracciones más frecuentes.
En materia de manejo de residuos, se resaltan los programas, inscripciones y/o refrendos de prestadores de servicio, pero lo significativo, es la cifra de autorizaciones para el manejo de residuos especiales y ello es así, ya que por la presencia grande del sector industrial y de la construcción se generan bastantes residuos de esa naturaleza y que de no controlarse podrían estar regados por todas partes con serios impactos ambientales, de ahí que se autorizaron 49, ello da cuenta del interés, responsabilidad y observancia de la ley de la materia.
En relación a los riesgos climáticos, se hizo hincapié en las inundaciones y para ello se reforzaron acciones de mejoramiento y construcción de infraestructura pluvial, aunque en el presente año también se reportaron sequías, que es la otra cara de los riesgos. También hubiera sido bueno contar con indicadores en cuanto a la reducción de inundaciones, sobre todo en la zona metropolitana.
Finalmente, se hace alusión a la instrumentación de un Protocolo de Actuación Ambiental y Social en la obra pública como mecanismo de participación social, a fin de lograr la conservación del medio natural en contextos urbanos, lo que suena bastante prometedor.
Ahora bien, lo que viene por delante o para el 2021, se puede resumir en los siguientes ejes torales:
- Inclusión en todos los instrumentos regulatorios y normativos de los principios y valores éticos ambientales
- Actualización del marco jurídico ambiental estatal y otras leyes relacionadas como el Código Urbano y la Norma Técnica Estatal de Manejo de Vegetación. Los reglamentos ambientales municipales, aunque el Municipio de Querétaro ya lo llevó a cabo.
- La publicación del Ordenamiento Ecológico Regional, para dar certeza y referencia a los instrumentos locales municipales
- Los planes y programas para la infraestructura energética, es decir, para lograr una soberanía energética que sostenga el crecimiento económico y sobre todo del sector industrial que cada año incrementa su demanda.
- La estrategia de para enfrentar el cambio climático
- La incorporación de un modelo de economía circular
- La tipificación de nuevos delitos ambientales dentro del Código Penal del Estado, para lo cual ya se han presentado dos iniciativas.
- La estrategia de conservación de la Biodiversidad en el Estado
- Y el programa que contemple la infraestructura de tratamiento de aguas residuales, así como aquella para traer agua de la reserva ya decretada, hacia las zonas metropolitanas.