La pintura de los grafitis hechos por las feministas el lunes pasado en el Acueducto penetraron la parte porosa del principal monumento de Querétaro, indicó Rosa Estela Reyes, representante del INAH. Los trabajos de restauración podrían tardar una semana, igual que en el convento de Santa Rosa de Viterbo que también fue vandalizado por los colectivos.