En Querétaro se han incrementado 246% los homicidios en los últimos diez años, al pasar de 89 en 2009 a 219 en 2019, pero el mayor aumento se advierte en lo que va de la administración de Francisco Domínguez, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). En 2015, el del cambio de administración estatal, se registraron 140 asesinatos. En 2016, primero del actual mandatario hubo 137 y en 2017 comenzó a superar, por primera vez, las dos centenas al subir a 218 y en ese nivel se ha mantenido, con 229 en 2018 y, leve descenso en 219 en 2019.
Así se advierte en las estadísticas preliminares de homicidios dadas a conocer por el INEGI a nivel nacional y por entidad, que en total superan los 36 mil, es decir, a razón de 29 casos por cada 100 mil habitantes, tasa similar a la registrada en 2018.
Las entidades con más muertes violentas son en nuestro complicadísimo vecino: Guanajuato con 3,974 en los más poblados, como el Edomex con 3,237 y Chihuahua con 2,935, además de Baja California con 2,811.
Y los estados con menos homicidios son liderados por el pacífico Yucatán que tuvo 45 en 2019, contra los 37 de hace diez años. Su vecino Campeche registró 83 y son los únicos por debajo de la centena.
Estas cifras se derivan de la estadística de defunciones anotadas, a partir de los registros administrativos de defunciones accidentales y violentas, los cuales son generados por las entidades federativas y que son recopilados mensualmente por la institución.
Las fuentes informantes que tuvieron al menos un registro de homicidio corresponden a 405 Oficialías del Registro Civil,259 Agencias del Ministerio Público y 106 Servicios Médicos Forenses. Se indicó que a partir de 2015, el INEGI capta información de presuntos homicidios directamente de los Servicios Médicos Forenses por medio de los certificados de defunción que emiten para las muertes accidentales y violentas. Además, capta datos en las Oficialías del Registro Civil a través de actas y certificados de defunción.
Esta información se complementa con la proporcionada por las Agencias del Ministerio Público mediante cuadernos estadísticos.
Cabe señalar que los homicidios forman parte de las defunciones accidentales y violentas, cuya clasificación se determina con base en las afecciones y lesiones (causas), la presunción del tipo de defunción y el motivo de la lesión, registrados en el certificado de defunción. Las primeras dos son fundamentales para distinguir entre un presunto homicidio, un presunto accidente o un presunto suicidio, aunque en algunos casos el certificante carece de elementos suficientes para identificar la intencionalidad del hecho ocurrido.
Debido a la emergencia sanitaria causada por el virus SARS-CoV-2 que produce COVID-19, la cual tuvo impacto en la recopilación y procesamiento de la información de las defunciones, en este año la difusión de cifras preliminares de homicidio, registrados en 2019, se reprogramó de julio a septiembre. No obstante, la publicación de las cifras definitivas se mantiene en la fecha programada (29 de octubre), con la difusión del total de defunciones registradas en 2019.