José Roberto Granados Olvera, con 17 años trabajando en Servicios Públicos Municipales de Corregidora, conoce las entrañas y el manejo de herramientas, que iniciaron con la escoba y la recolección de basura, el uso de la maquinaria, el manejo de excavadoras y dragas para desazolvar los drenas hasta llegar a limpieza de fosas sépticas.
“Tengo 17 años trabajando; empecé como recolector de basura, estuve un tiempo en limpia y barrido, luego comencé con la retroexcavadora revistiendo caminos de saca para las comunidades, luego empecé a desazolvar los drenes de Corregidora para que corriera el agua y ahora estoy en funciones de limpieza de fosas sépticas”, compartió con orgullo el señor José Roberto Granados Olvera.
En cualquiera de sus labores de limpieza, lo que más disfruta es servir y ver la sonrisa de la gente cuando termina su trabajo, una labor que le ha permitido conocer el municipio hasta sus entrañas, literalmente, al llegar donde no todos llegan.
“Nos ha tocado ayudar con la limpieza de las fosas, que si no se limpian son un foco de infección. Con nuestro trabajo la fosa queda limpia, sin malos olores y la gente queda muy contenta cuando nos vamos de ahí”.
El municipio crece
Don José es un testigo de cómo ha crecido Corregidora, llega a fraccionamientos que hace meses no estaban, pero que requieren sus servicios“Nos quedamos de a seis cuando llegamos a un lugar o fraccionamiento que no conocíamos y ya tiene servicios, banquetas. Hace unos meses no estaba y llegas y ya está todo listo; la verdad está creciendo de volada, pero a todo se le da abasto”, dijo José Roberto.
El trabajador ha visto la transformación en la cultura de los habitantes del municipio, al destacar que cada vez la gente se preocupa más por separar la basura y depositar los desechos en los lugares y horarios establecidos para ello “Ahora la gente sale y se junta la basura en un solo lugar, la separa y así es más fácil recogerla, lo que evita que se tapen las rejillas; la gente sale a limpiar sus banquetas y l están haciendo las fosas en lugares estratégicos para que cuando haya un escurrimiento no afecte a los vecinos y haya malos olores”, comentó el señor Granados Olvera, quien dijo que ahora que se reunieron para recibir la Escoba de Platino pudo ver a parte de los 70 compañeros con los que trabaja y no siempre tiene oportunidad de saludar. Finalmente pidió a la ciudadanía un poco de paciencia, ya que toda obra y trabajo lleva tiempo “La verdad van muy bien, sólo que nos tengan paciencia en nuestro trabajo ya que a veces lleva tiempo”, dijo José Roberto quien sale temprano de la calle Juventud, en Corregidora, para iniciar su trabajo a las siete de la mañana y cuando salga el sol la ciudad se encuentre limpia y funcionado.