Un total de 11 mil habitantes de ocho localidades en Corregidora contarán con un nuevo pozo de agua potable, además de la modernización de la red de distribución, con el fin de mitigar el déficit en el suministro que padecen desde hace varios años.
Las comunidades beneficiadas serán La Poza, Ejido San Rafael, Puerta de San Rafael, Taponas, San Miguelito, Presa de Bravo, Bravo y Las Taponas. De acuerdo con el presidente municipal, Josué Guerrero Trápala, el proyecto se desarrollará en coordinación con el gobernador Mauricio Kuri González y la Comisión Estatal de Aguas (CEA).
“Ya tenemos la certeza de parte del gobernador de invertir recursos en esta zona para perforar este nuevo pozo, actualizar la infraestructura y que no nos falte el agua en la zona norte de las comunidades”, afirmó el alcalde, quien adelantó que en los próximos días se darán a conocer los detalles de la inversión.
El pozo busca complementar al actual sistema de abasto para cubrir las necesidades básicas de las familias. El objetivo, señalaron las autoridades, es mejorar la calidad de vida de los habitantes, garantizar un servicio más eficiente y contribuir al desarrollo social de la región.
El estudio técnico fue elaborado por la Secretaría de Obras Públicas Municipales, a cargo de Viridiana Nava, y se venía gestionando desde tiempo atrás. La obra representa una respuesta a las demandas ciudadanas por un servicio de agua constante, en un contexto donde las comunidades han enfrentado limitaciones para acceder al recurso.
En días recientes, habitantes de la zona de Bravo señalaron que la escasez de agua ha afectado sus actividades domésticas y productivas, por lo que esperan que el nuevo pozo pueda dar solución a un problema recurrente en las localidades rurales del municipio.








