Agustín Zepeda F.
Luego de que Gallos Blancos salió de zona de clasificación al perder el domingo pasado 1-0 frente a Santos Laguna, colocándolos en el décimo lugar de la tabla general, el cuadro queretano deberá aprovechar que jugará dos partidos de forma consecutivo en el Estadio Corregidora.
Luis Noriega, volante del cuadro “emplumado”, aseveró que no pueden dejar escapar puntos, para así regresar a zona de Liguilla.
“Es una semana definitiva para nosotros ya que son nueve puntos, luego visitaremos a América. Sabemos que es la recta final del torneo, no podemos cometer errores y tenemos dos partidos seguidos en casa, nos hemos hecho fuerte y espero que vayamos por el buen camino, hay que buscar ganar”, fueron las palabras del mediocampista en rueda de prensa celebrada ayer por la mañana en el Centro Gallo de Alto Rendimiento.
Este sábado recibirán los Gallos de Querétaro a los “Rojinegros” del Atlas a las 5:00 de la tarde, en duelo correspondiente de la cabalística Jornada 13 y el miércoles 12 le harán los honores en el “Coloso del Cimatario” a los Xolos de Tijuana, para celebrar el compromiso suspendido de la Jornada 10 por la huelga arbitral.
El exjugador de los “Camoteros” del Puebla fue claro que no solo deben ganar sus compromisos en casa, también deben sumar cuando jueguen en “patio ajeno” para lograr la ansiada calificación a la Liguilla.
Del mismo modo rechazó que haya presión por conseguir el boleto a la “Fiesta Grande”, instancia en la que no hay ingresado en los últimos tres campeonatos, “estamos comprometidos, llevamos varios torneos sin calificar. La meta es la Liguilla, quedan los partidos más importantes, estamos cerca de estarlo y tenemos la confianza de que vamos a llegar. El equipo ha mejorado en todas las estadísticas y tenemos fe y confianza que vamos estar entre los ocho mejores”, dijo tajantemente.
Por su parte, Gerardo Lugo invitó a la afición queretana a asistir al partido en plan familiar, para evitar actos de violencia en la tribuna, que afecten y manchen el espectáculo que se vivirá en el terreno de juego.
“Es un partido de futbol, hay niños, mujeres, la gente va a divertirse y la rivalidad solo debe quedarse en eso, no se puede rebasar más allá”.